


Ana de Armas, esta completamente entregada a la película, y hace un gran esfuerzo por mantener el nivel incluso en los momentos en los que el relato puede flojear. Todo en la película resulta muy increíble, pero es lo que se pretendía, pues su director y escritor, no hace otra cosa que jugar con la complicidad del espectador que disfruta con este tipo de películas para darle todo lo que le gustaría ver en una película. Y eso sin duda, lo hace muy bien Trashorras, se nota que ha disfrutado mucho con este tipo de cine y ha llevado a la pantalla todo aquello que le gusta.

Por cierto, los créditos iniciales, juegan al despiste, pero también son un homenaje a cierto tipo de cine, y que os animo a descubrir.