El día 1 de mayo, cien jóvenes se reúnen en el arcén de una carretera para comenzar 'La larga marcha'. Una competición donde a quien no continua andando le dan 'pasaporte'. Y no con un sello precisamente.
Cien seres humanos, cada uno con sus aspiraciones, sus problemas, sus egos. Y sus miedos, sobre todo sus miedos.
'La larga marcha'
Stephen King
Editorial: DeBolsillo
Cada poco tiempo vuelvo a las novelas de Stephen King. Y me sigue dando la sensación de que su etiqueta de autor 'bestseller' tapa el gran escritor que es. Nubla a la crítica. 'La larga marcha' es una de las primeras novelas que escribió el de Maine. Durante sus estudios universitarios, años antes de la publicación de la aclamada 'Carrie'. Más tarde la publicaría con el seudónimo de Richard Bachman y se convertiría en uno de sus libros más sorprendentes.
La novela, publicada en 1979, está ubicada en un futuro cercano que bien podría ser el nuestro. Una sociedad estadounidense regida por 'el Comandante' un caudillo carismático. Querido y odiado a partes iguales. Un presente monstruoso, pero perfectamente imaginable.
"Ahora ya no lo deseo. Es un asco. Y un fraude. Te concentras en una cosa... te dedicas sólo a eso...y al final no la deseas. ¿No es una lástima que las grandes verdades sean grandes mentiras?"
En este mundo totalitario, 'La gran marcha' es el evento más importante del año. El pan y circo para los ciudadanos. Un reality show a nivel nacional. Un carrera alrededor de la cual los espectadores invaden el arcén esperando la próxima muerte, dispuestos a conseguir cualquier souvenir de los participantes, ansiosos de contar en casa lo que han visto.
Por su parte, los caminantes luchan por la gloria más absoluta. Por ser héroe nacional. Hasta la muerte si es necesario.
Una muestra de hacia donde camina el ser humano. Una carrera hacia los más profundo del hombre. King demuestra que es capaz de analizar capa a capa los miedos y deseos de sus personajes. Para ello crea personajes prototipo que se convierten en personas de carne y hueso. Algunos planos -como los que 'reciben boleto' sin piedad- y otros con mil aristas como el protagonista Garrety o el fantástico McVries que muestran como el cerebro puede luchar contra todos los dolores menos contra la desesperación y contra el propio cerebro.
Una novela llena de simbolismo, de crítica y horror humano. Una de las pioneras (después vendrían 'Battle Royale' y 'Los juegos de hambre'). Una nueva oportunidad de disfrutar de Stephen King. Esta vez alejado de sus novelas de terror. Pero no del miedo.