El número cuatro en el color azul luce este domingo por todos los lados de Belo Horizonte. La capital del estado de Minas Gerais tiene motivos para estar orgulloso de sus dos equipos, Cruzeiro y Atlético Mineiro, que disputan el próximo miércoles la final de la Copa de Brasil. Pero hoy, la fiesta es toda de la hinchada celeste, que puede presumir deltetracampeonato brasileño conquistado por su club tras la victoria de hoy ante el Goiás (2-1). El Cruzeiro no sólo ha revalidado su dominio, con su segundo título consecutivo, como también es el primer equipo fuera del eje Río de Janeiro-São Paulo a ganar cuatro títulos o más de la liga nacional y puede lograr el doblete con una victoria ante el gran rival dentro de dos días.
Santos y Palmeiras ganaron el Brasileirão ocho veces. El São Paulo, seis. Corinthians y Flamengo, cuatro. Vasco, Fluminense y, ahora, el Cruzeiro, tienen cuatro.El equipo mineiro ganó la Taça Brasil del 1966, con los grandes Piazza, Dirceu Lopes y Tostão, el Campeonato Brasileiro de 2003 y los de 2013 y 2014. Dos años en los que fue absoluto en su superioridad ante los rivales.
El secreto del Cruzeiro está en la estabilidad de una la planificación profesional y a largo plazo, que empieza por la apuesta en su entrenador. Marcelo Oliveira lleva casi dos años en el comando del equipo, cosa rara en Brasil. Exfutbolista de éxito durante los años 1970 en el rival Atlético Mineiro y siete veces internacional con Brasil, el técnico de temperamento tranquilo y conciliador ha montado un equipo veloz y intenso, que juega un fútbol bonito pero sin dejar respirar a los rivales. Un equipo unido y harmonioso, méritos del entrenador que supo administrar la plantilla que se permite el lujo de tener a Julio Baptista, Dagoberto y Neílton en el banquillo.
El club azul de Belo Horizonte se ha mostrado prácticamente imbatible durante toda la temporada. Tiene el mejor ataque del Brasileirão, con 63 goles, el pichichi del campeonato, el mediapunta Ricardo Goulart, con 15 goles, sólo ha perdido dos partidos en casa y lleva ocho jornadas sin perder.La fuerza del Cruzeiro de Marcelo Oliveira es su mediocentro, donde la rapidez en la transición del balón y el toque de calidad del trío formado por Goulart, Éverton Ribeiro y Henrique dan el ritmo y los pases para el boliviano Marcelo Moreno en el ataque. Y hoy brilló más una vez el conjunto.