Un sistema de educación equitativo y de calidad debe garantizar inclusión y aprendizaje significativo para todos los niños y jóvenes, ya que solo de ese modo lograremos la verdadera justicia educativa en Argentina.
La sociedad del conocimiento y el desarrollo de Internet nos obligan a repensar el modelo pedagógico tradicional que hoy se ha vuelto obsoleto. Los saberes disciplinares, desconectados unos de otros, que la escuela tradicional intentó que los chicos incorporaran en gran medida a través de la memorización, ya no son apropiados en un mundo en que la información está al alcance de un click donde, de modo inmediato, accedemos a los saberes que la humanidad ha producido. Pedir a nuestras generaciones jóvenes que se sienten pasivamente por horas a recibir una lección expositiva de un maestro es obligarlos a aceptar una situación para ellos incomprensible, sin estímulo, y que, sin lugar a duda, van a resistir. Ellos no aprenden, el comportamiento se ve afectado, y los maestros sienten una enorme frustración.
Compartimos algunas preguntas fundamentales que nos hacemos para intentar colaborar en la reflexión y el diseño de políticas adecuadas para transitar hacia un cambio educativo, apropiado para el siglo XXI: ¿Cómo transitar hacia un modelo donde los estudiantes sean protagonistas en la construcción del conocimiento? ¿Cómo desarrollar a los maestros para que pasen a ser facilitadores en el proceso que lleva a los alumnos a aprender a aprender, a resolver problemas, a clasificar información, a trabajar de manera colaborativa y por proyectos? ¿Cómo convertir las aulas en verdaderos laboratorios de innovación? ¿Cómo transitar del modelo pedagógico homogéneo, donde los saberes los imparte el docente a todos sus alumnos por igual, a uno heterogéneo, que respete la diversidad de intereses, ritmos de aprendizaje, talentos, y sueños de cada alumno?
Debemos acordar como sociedad cuál es el nuevo rumbo, y cómo comenzar a transitarlo. Esperamos que este aporte, basado en los avances académicos sobre el tema, contribuya al debate constructivo y a dar luz a las políticas necesarias que un nuevo paradigma educativo requiere, en miras al desarrollo genuino de nuestros pequeños y jóvenes, que son, sin ninguna duda, nuestro recurso más valioso.
Agustina Blanco
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Acerca de Lic AUS Jorge Luis Prioretti
Licenciado en Organizaciones sociales y culturales - USAL. Analista universitario en sistemas - UTN. Profesor Sup. Filosofía y Cs. Educación.