Revista Cine
Sin duda alguna la mejor interpretación de Eduardo Noriega
Con esta licencia empiezo a hablar de "El mal ajeno". El joven Oskar Santos gracias al brillante guión de Daniel Sánchez Arévalo y patrocinio de Amenábar presenta la oscuridad de Diego, un médico de la unidad del dolor, que sabe muy bien cómo alejarse del dolor de los pacientes.
Te dice que tienes una pancreatitis sin miramientos. Es muy frío este tipo.
Tienes cuarenta y tantos años, está divorciado y tiene una hija de 17 años(Clara Lago)
Quizás el reto de dar con esa pulcritud de los médicos, esa mirada fría...componen para Diego la rutina del desencanto hasta que algo sucede para cambiarlo todo.
Fantasía, realidad, en medio de la oscuridad de una peli rodada con planos en los que solamente he contado un atardecer, todo está rodado en estudio.
El hospital, la casa de la exmujer de Diego(Cristina Plazas), y una inquietante Belén Rueda.
Personajes que no entienden de dolor, que necesitan amar, en la soledad más absoluta El mal ajeno habla desde las tripas de cómo cambiar el rumbo, habla de detalles y de vida, y de un don. Un don que determina el fin de los acontecimientos.
Excelente película donde Noriega demuestra, y digo bien, que ya hace tiempo que hay que tomarle en serio.