Temática: la soledad y el miedo a amar.
Momento para verla: si no consigues cuajar en el amor y estás hasta las narices de que te pregunten “¿y tú, para cuándo?” en las reuniones familiares. Sinopsis: Lars, un chico tierno pero muy tímido que vive en un pueblecito americano con su hermana y su cuñado, conoce a la chica ideal. Con la particularidad de que dicha chica es una muñeca erótica de tamaño natural, con la que inicia una relación de noviazgo de lo más peculiar.
Comentario: una historia muy hermosa que trata sobre el deseo de amar contrapuesto a la incapacidad para acercarse a los demás, todo ello enclavado en un marco y unos personajes muy especiales.
Recomendada por: su sencillez, su mensaje y su certera metáfora sobre los miedos. A destacar la asombrosa “interpretación” de la muñeca Bianca. A través de todo el reparto de la película, conseguimos creernos que está viva. Un buen puñado de certeras apreciaciones sobre la vida y la capacidad de cambio conducirán a un final inesperado y sorprendente.
La frase: “A veces me siento tan sola que olvido qué día es y cómo deletrear mi nombre”
La crítica dijo: “La película, en definitiva, es un profundo, original e impactante análisis de la soledad y de los mecanismos cerebrales para subsanarla” (Luisfer Romero, www.blogdecine.com)
Conclusión: Ryan Gosling consigue hacer suyo al retraído Lars. Junto a él y a su entrañable muñeca, resulta un auténtico placer acogerse durante un rato en este pueblo irreal lleno de buenas personas.
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