Me gustaría, a partir de ahora presentaros de vez en cuando, a algunas de las personas que más me han inspirado a la hora de decidirme a hacer este esfuerzo por cambiar a un estilo de vida más sano.
En este caso os quiero presentar a Ana Moreno a través de una de sus recetas, la cual a su vez me pasó una amiga que es también una inspiración (además de muy buena cocinera). Un pan integral casero de espelta y centeno, sin harina de trigo.
Pues os cuento, esta receta es de un pan integral a base de harina de centeno y de espelta, perfecto para evitar la harina de trigo refinada, aunque en este caso NO es sin gluten. Es un pan muy fácil de hacer, porque se hace como un bizcocho, no hace falta amasar ni nada de eso, así que es rapidísimo, en lo que más tiempo se pierde es en el rato que tiene que reposar. Su sabor es fuerte, pero está muy bueno, perfecto para acompañarlo con algo suave, o incluso simplemente con un chorrito de aceite en el desayuno. Además a mi me gusta porque es muy saciante, si lo tomas en el desayuno, es probable que puedas aguantar perfectamente hasta la comida (a mi me funciona). En mi casa es una pena que no dure mucho, ¡por que nos encanta!
Y antes de ir con la receta, os quiero hablar como no, de mi “invitada de honor”. Quizá la mas radical de las personas a las que leo o veo, en el sentido de que aboga por una dieta vegana 70% cruda, es decir, que no incluye nada de origen animal y que intenta comer mayoritariamente los alimentos en crudo. Cuando digo radical, no lo digo para nada de forma negativa, si no por que está más alejado de lo que la mayoría considera como “normal” (algo muy discutible eso de la normalidad). Desde que vi el video del pan me gustó, porque viendo sus recetas cualquiera diría que es muy fácil llevar una alimentación alternativa. Además aporta muchos datos sobre las propiedades de los alimentos, porqué se debe comer esto o no comer lo otro, etc.
Y por si esto fuera poco, resultó que no solo tenia los videos del youtube del canal cocina, si no que tiene un hotel Rural Vegetariano y Crudivegano (La Fuente del Gato), dirige cursos de cocina vegetariana (online y presenciales), ha publicado montones de libros sobre alimentación vegetariana y crudivegana, tiene un programa de radio (Café Morenini)… me dejo cosas, pero es toda una emprendedora!! Por lo tanto no solo un ejemplo a nivel de alimentación, si no también como persona que no tiene límites a la hora de asumir proyectos. No la conozco personalmente, pero viviendo en la misma ciudad, la verdad es que me gustaría asistir algún día a alguno de sus talleres en la escuela de cocina que ha abierto aquí en Madrid.
Pero bueno, mejor os dejo algunos enlaces para que podáis conocerla mejor por vuestra cuenta:
- Su web, con enlaces a los cursos que organiza, los libros, su blog, etc.
- Su canal en youtube
- El canal de su programa de radio (con todos los programas).
- Y también en Youtube la podéis encontrar en Canal Cocina donde tenía un programa llamado 100% Vegetal. Justamente de aquí es la receta del pan integral casero, que paso a explicaros ya.
Ingredientes:
- 250 gr. de harina de espelta
- 250 gr. de harina de centeno
- Levadura de panadero
- Sal
- 375 ml. de agua
Facilísimo ya lo veréis. Os la explico como yo la hago, pero al final os dejo un enlace al vídeo donde Ana Moreno prepara el pan.
Sólo hay que mezclar las dos harinas, con la levadura de panadero y una cucharada de sal en un bol. A continuación, se hace un pequeño hueco en el centro y se le añade el agua. Aunque ponemos 375 ml. la cantidad de agua puede variar, puede ser que finalmente necesite algo mas o menos, eso lo vamos viendo. Removemos todo bien, hasta que se haga una masa compacta que se despega del bol. A mi en este punto me gusta añadirle unas semillas de chía, que le añaden valor nutricional, ya que no pierden propiedades con la cocción, y además apenas se notan (para los que tengan recelo de las semillas). Pero se le pueden añadir otras cosas para variar un poco o darle una nota diferente. Cuando ya lo tenemos, tapamos bien la masa y la dejamos fermentar durante un mínimo de dos horas.
Una vez pasado el tiempo, que la masa ya habrá subido, la pasamos a un molde para hornear. Yo le suelo untar un poquito de aceite en la base para que no se pegue, pero se puede usar también papel de hornear e incluso algunos moldes de silicona no se pegan nada. Para darle la forma te puedes ayudar de una cuchara o espátula, que puedes humedecer ligeramente para que no se le pegue la masa. A continuación, con un cuchillo (también húmedo, no empapado) hacemos unos cortes en la masa para que respire. Y antes de meterlo en el horno, puede también decorarse por encima, yo a veces lo hago sin nada, pero otras veces le pongo orégano o albahaca que le da un puntito de sabor extra (y no os imagináis como huele la casa cuando está en el horno). Ana por ejemplo, lo decora con unas semillas de calabaza.
Para finalizar lo metemos en el horno durante una hora. El horno lo tendremos precalentado a 220º, y tendremos la masa a esa temperatura durante 25 minutos. Pasado este tiempo, cambiamos a 170º y lo dejamos otros 35 minutos. ¡No abráis el horno cuando cambiéis la temperatura!. Una vez que se enfríe un poco (no os queméis) se desmolda y listo
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Y voilà! tenéis un pan integral casero, sabroso, sano y que sabéis exactamente lo que contiene, nada de E-lo que sea, ni gluten añadido, ni harinas refinadas, ni cosas raras. Ahora solo hay que pensar, con qué acompañarlo. Aprovechad y que sea de cosas ricas y saludables! Pasad de embutidos y salsas precocinadas
Por cierto aquí podéis ver el vídeo de la receta preparada por Ana Moreno en Canal Cocina.
Espero mucho que os guste, que probéis a prepararlo en casa y que también este post os haya servido para conocer a alguien interesante que os aporte a vuestras vidas, como intento hacer yo
Contadme cositas en los comentarios!!