El tamaño de los manuscritos
En ocasiones, me topo con autores noveles que tienen la creencia de que es mejor escribir una novela larga que una corta, porque entienden que tiene mayor calidad.
Novela corta: de entre 30.000 a 50.000 palabras (unas 100 páginas de Word)
Novela larga: a partir de 50.000 palabras.
Hoy quiero comentar porqué creo que esta afirmación para mí es errónea.
Seguramente esta creencia venga de las lecturas de novelas extensas de grandes escritores. Nos impresiona la cantidad de páginas bien escritas que leemos y, de alguna forma, podemos querer tratar de seguir sus pasos escribiendo una obra similar, al menos en extensión.
En mi experiencia, para un escritor novel esto es casi imposible. Suelo recomendar escribir historias más cortas, por qué:
Porque es más sencillo manejar menos personajes y menos tramas.
Porque las correcciones también serán menos costosas.
Porque nos llevará menos tiempo y menos frustraciones. Incluso evitará el abandono de la historia.
Porque ninguna editorial se va a interesar por un libro tan extenso de un escritor novel (cuanto más gordo sea el libro, más costes de fabricación).
Porque resumir está infravalorado y saber quitar personajes, escenas y descripciones irrelevantes es muy difícil, por eso una obra larga suele ser peor, porque no está pulida de todo lo que sobra.
Blog de literatura con recomendaciones de libros, consejos para escritores noveles, muchas curiosidades e información de la escritora Elena Cardenal, de sus talleres de escritura creativa y de todos sus libros publicados.
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