En el Etihad Stadium, Manchester City derrotó 3-1 al Liverpool

Manchester City derrotó 3-1 al Liverpool y es el líder por mayor diferencia de gol de la Premier League. El montenegrino Stevan Jovetic y el argentino Sergio Agüero anotaron los goles del partido.

El campeón camina con paso firme hacia el bicampeonato. El Manchester City no tuvo problemas en golear en su estadio al Liverpool, subcampeón de la pasada edición de la Premier League, y dejar en claro que es uno de los más serios aspirantes a llevarse nuevamente la corona. Los ‘reds’ pagaron caro sus errores defensivos y extrañaron en demasía a su ex estrella Luis Suárez, hoy en el Barcelona.

Pese a su condición de campeón, los hinchas del fútbol inglés no consideraron en una encuesta al City dentro de los tres aspirantes al título de este año, seguramente por la gran pretemporada y contrataciones de otros equipos pero el equipo de Manuel Pellegrini está demostrando en este arranque de curso que tiene los pergaminos para soñar con su primer bicampeonato.

Bajo la estrella del montenegrino Stevan Jovetic, el Manchester City superó con mucha facilidad al Liverpool. A base de buen fútbol, amplitud por las bandas y un ataque endemoniado con Jovetic y Dzeko, el cuadro ciudadano se hizo con el dominio del partido pero la apertura del marcador devino de un error del Liverpool, cuando Jovetic aprovechó una desatención del lateral Moreno para fusilar a Mignolet.

Por la banda de Alberto Moreno, nuevo fichaje para la presente temporada, llegaron las mejores ocasiones del City. Una buena jugada liderada por Samir Nasri terminó en el segundo gol de Jovetic, quien selló con un zurdazo una buena combinación ‘citizen’.  El ‘Kun’ Agüero hizo su ingreso por un lesionado Edin Dzeko y anotó a los segundos de su ingreso al aprovechar una transición rápida iniciado por el meta Joe Hart.

El Liverpool, que horas antes del partido anunció el fichaje de Mario Balotelli, necesitara del talento del delantero italiano para aspirar a ganar la Premier League. Hoy fue un cuadro timorato, que quedó preso del juego del City y que mejoró en el tramo final con el ingreso de Rickie Lambert, quien descontó a poco del final y casi le pone emoción al partido cuando un remate suyo fue salvado en la línea por Vincent Kompany.

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