FICHA TÉCNICA
Dirección: Steven Spielberg
Guión: Lee Hall, Richard Curtis; basado en el libro de Michael Morpurgo y en la puesta teatral de Nick Stafford
Producción: Steven Spielberg, Kathleen Kennedy
Producción ejecutiva: Frank Marshall, Revel Guest
Música: John Williams
Dirección de fotografía: Janusz Kaminski
Montaje: Michael Kahn
Diseño de producción: Rick Carter
Vestuario: Joanna Johnston
FICHA ARTÍSTICA
Albert Narracott: Jeremy Irvine
Lyons: David Thewlis
Rose Narracott: Emily Watson
Soldado Geordie: Toby Kebbell
Gunther: David Kross
Ted Narracott: Peter Mullan
Abuelo: Niels Arestrup
Sargento Fry: Eddie Marsan
Major Jamie Stewart: Benedict Cumberbatch
Capitán Nicholls: Tom Hiddleston
Emilie: Celine Buckens
Argumento:
Este sobrecogedor relato sobre un chico llamado Albert y su querido Joey, un caballo de granja, se inicia con el estallido de la Primera Guerra Mundial. El padre de Albert vende a Joey a la caballería del ejército británico para luchar en el frente. Joey será testigo de un extraordinario periodo de la Historia con la Gran Guerra como trasfondo. A pesar de los obstáculos que encuentra en su camino, su coraje será fuente de inspiración para todos los que se cruzan con el noble animal. Albert no puede olvidar a su amigo y abandona su hogar para luchar en los campos de batalla de Francia. Allí busca incansablemente a su amigo para traerlo sano y salvo a casa.
Caballo de batalla es una de las películas mejor realizadas técnicamente. Verla es un lujo en cuanto a la dirección de la fotografía, perfectamente realizada, y si hay que ponerle alguna pega, hay momentos algo típicos, no sólo por foto sino por escena emotiva, pero que están tan bien hechos que al final poco importan.
Se nota que Spielberg está detrás, tiene su sello inconfundible a la hora de dirigir, y es que en ocasiones parece más preocupado en el resultado final que en la historia, que no nos engañemos, no va de un chico y su caballo, sino de su caballo pasando por todo tipo de historias en la guerra. Por lo que veremos una sucesión de caras conocidas que nos sabrán a poco, como Benedict Cumberbatch o Tom Hiddleston. Pero hay que decir que Jeremy Irvine, en su papel de co-protagonista y de los pocos humanos que aparece más rato en pantalla, es una buena apuesta de futuro.
Se agradece que para aligerar un poco la narración nos encontremos con toques de humor, representados en un curioso ganso, o en un encuentro de soldados tan extraño como absurdo en medio de una guerra, pero es lo que tienen los caballos especiales como éste, que producen momentos impensables a su alrededor.
Hay que reconocer que el metraje es largo, y en varios momentos la acción decae, pero si uno centra su atención al conjunto, se encontrará con una buena película bien realizada y aderezada con una banda sonora acorde, que acompaña y no distrae. Y sobre todo, cómo narices puede un caballo ser tan expresivo y tan humano.
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