FICHA TÉCNICA:
Dirección: Emmanuel Mouret
Guión: Emmanuel Mouret
Producción: Marc Bregain
Fotografía: Laurent Desmet
Montaje: Martial Salomon
FICHA ARTÍSTICA:
Zoé: Pascale Arbillot
Emmanuelle: Ariane Ascaride
La vecina de Achille: Frédérique Bel
Achille: Françoiz Cluzet
Isabelle: Julie Depardieu
Amélie: Judith Godrèche
Ludovic: Louis-Do de Lencquesaing
Paul: Philippe Magnan
Laurent: Stanislas Merhar
Boris: Lauren Stocker
William: Gaspard Ulliel
Argumento:
El arte de amar es la nueva comedia romántica dirigida por Emmanuel Mouret y protagonizada por François Cluzet (Intocable). Mouret nos presenta cinco historias centradas en el amor, la búsqueda del amor y del ser amado. Historias cruzadas que se interseccionan por azar y que provocan diferentes conflictos emocionales en una serie de personajes al borde de la crisis sentimental. Cinco historias que, en definitiva, exploran los sentimientos y el arte de amar, las infidelidades y la necesidad de sentirse deseado.
El director Emmanuel Mouret dirige a este impresionante plantel de actores franceses en esta comedia fresca para hombres y mujeres, enamorados o desengañados, en definitiva para todo aquel que en algún momento de su vida haya sentido amor, haya escuchado esa musiquilla en su interior.

Parece que el género francés que mejor se vende en España es la comedia romántica, a juzgar por la cantidad de ellas que llegan a nuestras pantallas cada año, aunque la mayoría pase sin pena ni gloria. El arte de amar es una más de estas, y me temo que no va a tener mejor destino que otras ya que no es de los ejemplos más brillantes del género que nos ha traído el país vecino, por desgracia.
Emmanuel Mouret intenta marcarse un Love Actually a la francesa mostrándonos cinco historias acerca del amor en sus diferentes formas – lujuria a primera vista, amor incondicional, amor no correspondido, amor por casualidad, desamor.- El intento es encomiable y la factura no tiene pega que ponerle, el problema es que desde un punto de vista hispano/mediterráneo, estas historias no hay quien se las crea.

El tratamiento de los personajes es demasiado superficial y la frivolidad con la que se abordan cada uno de los temas hace que no quede ningún cabo al que agarrarse como espectador. Al menos, como ya he dicho, para el espectador español, que ya sabemos que aquí tenemos el dramatismo como bandera y eso no tiene cabida en esta película.
Supongo que a los francófilos les hará pasar un buen rato, y al resto puede que también, aunque lo más probable es que la mitad de la película se te olvide nada más salir del cine.