Siempre decoro mis ensaladas sobre la marcha, no hay nada premeditado, y a veces me gusta más y otras menos pero esta me ha encantado especialmente, parece una flor veraniega y es muy refrescante. Os invito a prepararla, es un plato único estupendo para estos días de calor tan intenso. Tanto que me negué a subir la persiana para hacer la fotografía y saltó el flash, que pena porque con su luz natural estaba preciosa. Toda ella vegetal, ligera para echarse después una buena siesta.
*Esta ensalada la tome de plato único un día que comía sola en casa.
INGREDIENTES
-hojas de espinaca fresca
-una latita de maíz que viene en tamaño individual, si no, media.
-un tomate hermoso
-cebolla frita deshidratada
-semillas de amapola, vinagre de manzana, aceite virgen extra y sal para la vinagreta
PREPARACIÓN
En el fondo de un plato llano hermoso o una fuente llana ponemos las hojas de espinaca cubriendo toda la fuente con la parte ovalada hacia fuera a modo de pétalos. Pelamos el tomate y lo cortamos en dados pequeños, lo colocamos en el centro. Encima espolvoreamos de cebolla frita deshidratada y coronamos con una lata de maíz de las que vienen individuales, si es normal pues media. Ahora preparamos la vinagreta mezclando en un cuenco pequeño o un vaso ancho cuatro cucharadas soperas de aceite virgen extra, una de vinagre de manzana, sal y semillas de amapola. Ponemos algo de sal sobre la ensalada y vertemos sobre todo en el centro de la ensalada la vinagreta. Servimos bien fresquita.