Así que para ir aprovechando este calor inexistente aún vamos con ensaladitas variadas, sanas y originales.
En este caso toca una nutritiva combinación de frutas con embutido y algo de queso, así que mucho sabor y también mucho contraste de salado con ácido.
El Pomelo es bastante peculiar, puede ser que guste mucho o nada. A mí me resulta muy interesante si se combina bien, con otros ingredientes, o frutas, porque sólo no me atrae tanto.
Ingredientes:
- 100 g de lechuga tipo iceberg
- vinagre de Módena
- aceite de oliva virgen extra
- 50 g de cabecero de lomo ibérico embuchado
- 1 pomelo
- 50 g de queso curado de oveja rallado
Para el pan lavash:
- 100 gr. de harina de panadería.
- una pizca de sal
- Media cucharada de levadura de panadería seca
- 1 cucharada de aceite vegetal
- 60 ml de agua
Elaboración:
Comenzamos preparando el pan, para dejarlo previamente hecho y darle el toque final antes de añadirlo a la ensalada.
Mezclar la harina, sal, levadura y aceite en un bol y amasar con las manos suavemente hasta obtener una masa uniforme.
Debe quedar elástica y que no se pegue a las manos.
Dejar reposar la masa en el bol, cubierta con papel film, para que fermente hasta que doble su volumen.
A continuación engrasar un poco una superficie lisa y extender bien la masa con ayuda de un rodillo para conseguir una lámina lo más fina que podamos, colocándola sobre una bandeja con papel de hornear.
Metemos la masa en el horno precalentado a 170ºC.
Horneamos durante 15 minutos o hasta que lo veamos dorado.
Sacamos y dejamos enfriar.
Cortamos el pan en tiras, pincelamos con aceite y espolvoreamos generosamente queso rallado por encima. Lo ponemos a gratinar durante unos minutos hasta que se derrita el queso y el pan nos queda en un crujiente.
Colocamos en un plato las tiras de pan, y encima la lechuga de tipo iceberg.
Agregamos unas rodajas muy finas de lomo ibérico embuchado.
Pelamos bien el pomelo y quitamos todo lo blanco. Vamos sacando los gajos a sangre, que no quede nada de piel para que estén suaves al comerlos.
Por último aliñamos al gusto, con aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal y vinagre de Módena.
Espero que si probáis esta curiosa combinación de sabores me contéis qué os parece.
Buena semana.
Dime que es Viernes: gastroblog.