¿Es más importante producir que aprender?

Intriga por entender que buscan

Desde hace un par de meses, me vengo preguntando qué razones tendrán la familia Salinas Pliego al estar en un tipo de campaña al público, enfocada, principalmente, en divulgar un estilo de vida materialista, competitivo y avaricioso, acompañado, generalmente, de las premisas del libre mercado en sus vertientes más radicales, al menos, dentro de lo que me ha tocado experimentar. Debo confesar que la mayor parte de mi experiencia con este tipo de contenidos ha sido con el propio Ricardo Salinas, empero, recientemente, también me tope con uno de sobrinos, generando contenido en tik tok de la misma línea.

Pareciera que, hay intención de hacer saber, a la mayor parte de personas posible, lo ricos, opulentos que son así como el fetén de vida que tienen, al menos en gran parte de sus publicaciones y con un mensaje que no va mas allá de crear polémica, admiración y envidia.

Ahora bien, ciertamente, poco hay que argüir acerca de publicaciones tan banales como las anteriores, aunque, concentrándonos, en aquellas manifestaciones en las que, claramente, presentan un discurso, podemos llevar a cabo muchas deliberaciones.

¿Producir es más importante que aprender?

Hace un par de días, me topé, en tik tok con una de esas publicaciones, Ricardo Salinas , le explicaba a un entrevistador que, uno de las grandes problemas de la sociedad actual es que hay muchas personas que pierden mucho tiempo estudiando, en lugar de producir, luego, añadió que, después de muchos años desperdiciados, se encuentra con la triste realidad de que ganan solo $50 mil pesos (como si además fuera un sueldo si quiera cercano a la minoría, de la minoritaria clase media mexicana).

Sin lugar a dudas, esa declaración me genero mucho conflicto interno, tanto a nivel moral, como al propio nivel económico. Empecemos por analizar la declaración, dentro del básico nivel económico. Ricardo Salinas, estableció que ser productivo es lo más importante, sin diferenciar tipos de actividad productivas, por lo tanto aquí nos encontramos con un primer óbice, y es que, hay que recordar que el sector económico dedicado a la educación, sin lugar a dudas, aporta una suma importante a la producción, y no podríamos decir que todas esas personas que están estudiando y pagando por ese bien están perdiendo el tiempo, sin suponer, primero, que toda actividad económica vinculada a la educación no es realmente productiva.

Luego tenemos, el conflicto moral, por un lado, Ricardo Salinas establece que es más importante producir que estudiar, sin embargo, antes de ser un conflicto moral, hay un problema de lógica y orden que no tiene solución, y es que nadie puede generar algo, sin saber cómo generarlo, así como los niños aprenden a hablar y a escribir, el agente económico, fabrica y produce después de haber aprendido como hacerlo. En todo caso, el trabajo, del que depende todo lo que producimos, se basa en un conjunto de normas y costumbres que hemos aprendido, previamente. De hecho, en aquella publicación de Tik Tok, el propio Salinas Pliego, esta transmitiendo conocimiento, noción que siempre estará vinculada a la educación, or lo que cae en una contradicción flagrante, sobre todo, cuando en un momento enfatizaba que generar un “monton” de papeles y escritos, hacían de la educación algo sin valor; ¿Y que diferencia habría, entonces, entre hacer un montón de escritos y un montón de videos?

Conclusiones

Por todo lo anterior, intuimos que, puesto que Ricardo Salinas es un exitoso empresario, no podría caer en contradicciones tan rudimentarias, y por tanto se refería, al acto de ser personas que solo adquieren conocimiento y no generan nada de valor a la sociedad; un hecho en situaciones que más bien son del dominio de lo privado, en tanto que la propia realidad termina exigiendo a los individuos, activarse para su propia sobrevivencia. El conocimiento, al ser algo inmaterial, se hace difícil de cuantificar, queda a juicio de cada quien cuando es mucho o poco conocimiento, en este caso nos puede ayudar mucho nuestro termómetro interno de felicidad y satisfacción personal. Ciertamente, podemos encontrarnos con personas que realmente no están conociendo sino que simulan estar educándose para evadir las responsabilidades de su vida, pero volvemos a lo mismo, esto queda en el ámbito de lo privado y la familia.