Revista Arte
¿Está el arte contemporáneo en camino de convertirse en una vertiente exclusiva de la web?
Por Deperez5Como le sucede a la mayoría de la gente, hasta ayer mismo estuve sumido en un estado de total confusión acerca del posible destino del arte en su actual estado de continua expansión (que a nada se parece tanto como a un incontenible proceso de disgregación), totalmente predominante en el presente, y vulgarmente conocido como arte contemporáneo.
Pero luego de leer una nota que consigna los avances de la revista Arte al Día en la plataforma web, publicada en la revista adn cultura del diario La Nación de hoy, 27/9/2013, tuve la repentina intuición de que la lógica interna del arte contemporáneo terminará por transformar su cauce principal en una más de las tantas vertientes o aplicaciones que la industria informática desarrolla para ipads, tablets y celulares inteligentes.
¿No es evidente, acaso, que más allá del net art, concebido expresamente para Internet, el mundo virtual aparece como el medio ideal para la difusión globalizada del aluvión de objetos irrelevantes y alegatos políticos, filosóficos o ambientales que constituyen el cauce central del arte contemporáneo?
¿Qué sentido podría tener la continuación in aeternum de la reiterada y previsible exhibición en museos y galerías de arte de las cosas banales, mil veces repetidas y a veces esperpénticas que caracterizan al arte contemporáneo, cosas que tornan innecesario el contacto directo con el espectador, porque carecen del virtuosismo artesanal que nos emociona y nos admira frente a una tela de Rembrandt o de Lucian Freud, y que una vez retiradas del museo nadie puede reconocer como obras de arte?
¿Por qué molestarse en hacer colas y pagar una entrada para ver objetos, acciones o declaraciones que según sus propios autores y sus animosos exégetas no tienen demasiada relevancia, porque lo que importa no es la supuesta obra de arte, sino el concepto que la sostiene?
¿Puede haber acaso un ámbito más propicio que la luminosa inmaterialidad de los bits y los pixeles para un arte que invoca la desmaterialización como su finalidad última?