Una sublime locura cinemática orquestrada a través de un mefitofélico personaje que se reencarna en asesino, magnate, actor o una criatura monstruosa que cabalga entre chimpancés y limusinas que hablan, fue para muchos la mejor película vista en Cannes y la incontestable triunfadora de Sitges. "Holy Motors" es cine (y arte) en estado puro y desbocado que hoy llega a nuestras salas...acompañada de un buen trago de Loach.
HOLY MOTORS
¿De qué va?
Desde el amanecer hasta la noche, algunas horas en la existencia del Señor Oscar, una persona que viaja de vida en vida. Pasa de ser un gran ejecutivo a un asesino, después un mendigo, una criatura monstruosa, un padre de familia... El Señor Oscar parece interpretar varios papeles, sumergiéndose completamente en cada uno de ellos, pero, ¿dónde están las cámaras? Está solo, únicamente acompañado por Céline, una señora grande y rubia que maneja la inmensa máquina que le lleva a París y sus alrededores. Como un asesino concienzudo que va de sueldo en sueldo. En búsqueda de la belleza de un gesto. Del motor de la acción. Mujeres y fantasmas de su vida. Pero, ¿dónde está su casa, su familia, su paz?.
¿Quién está detrás?
El padre de la criatura es Leos Carax, antiguo (y nuevo) enfant terrible del cine francés, un autor venerado que tras llevar 13 años sin rodar un largometraje regresa por la puerta grande.
¿Quién sale?
Su actor fetiche Dennis Lavant también regresa en toda su bizarra esencia (no hay más que ver la foto de pie de página) conducido por una Edith Scob que vuelve a enfundarse la máscara de "Los Ojos sin Rostro" y entre cuyas citas luce, o mejor dicho, suena, Kylie Minogue, quien, tras interpretar a una lesbiana sacudida por el romance entre las dos (también) lesbianas y licántropas, “Jack & Diane” (también se verá en Sitges) 'vuela' al mando de Leos Carax como azafata de Pan-Am. La guinda la pone...¿Eva Mendes resucitando a Amy Winehouse? No es el caso, aunque visto lo visto, que no os extrañe si llega el día.
¿Qué es?
Una sublime locura cinemática con claros ecos de Cocteau, Buñuel y Franju.
Imprescindible en caso de:
-Disfrutar de una película única en la historia de cine
-Ganas de Leox Carax 13 después de su último largometraje
-Que grande es Denis Lavant
-Fans de Kylie Minogue con ganas de verla convertida en musa del cine
-Fans de Eva Mendes con gans de verla con pinta de Amy Winehouse.
-Quiero volver a verla
Prescindible en caso de:
-Que bien que por fin se estrena el último "Crepúsculo"...
LA PARTE DE LOS ÁNGELES
¿De qué va?
En Glasgow, Robbie, un joven padre de familia, no logra escapar de su pasado delictivo. Se cruza en el camino de Rhino, Albert y la joven Mo cuando, como ellos, evita por poco la cárcel pero recibe una pena de trabajos sociales. Henri, el educador que les han asignado, se convierte entonces en su nuevo mentor y les inicia en secreto...¡en el arte del whisky! Entre destilerías y sesiones de degustación de alto copete, Robbie descubre que tiene un auténtico talento como catador, y rápidamente es capaz de identificar las cosechas más excepcionales, las más caras. Junto a sus tres compañeros, ¿se contentará Robbie con transformar este don en una estafa, una etapa más en su vida de delitos y violencia? ¿O en un futuro nuevo, lleno de promesas? Solo los ángeles lo saben...
¿Quién está detrás?
Volvemos a estar ante el tándem Ken Loach (dirección) y Paul Laverty (Guión), que deciden volver a lo cómico y dulce después de la mala recepción que tuvo “Route Irish”
¿Quién sale?
La apuesta de Loach sigue siendo por debutantes y no profesionales: Paul Bannigan (con sólo 20 años) se estrana en la gran pantalla como protagonista. Lo acompañan Gary Maitland o Jasmin Riggins. Y también cuentan con el talento del ya habitual John Henshaw, habitual de Loach.
¿Qué es?
Algo así como “Buscando a Eric”, sin fútbol pero con whisky-
Imprescindible en caso de:
-Ganas de un buen trago de Loach
-Me lo pasé pipa "Buscando a Eric"
-Me voy al cine con los colegas
-Adeptos al whisky
Prescindible en caso de:
- Loach para mi solo es tierra, lucha y libertad.