Quién le iba a decir a Raul Meireles hace ahora diez meses que el centrocampista se iba a convertir en uno de los jugadores más laureados de esta temporada. En la misma línea que el Chelsea, club en el que milita desde el invierno de 2011, el internacional portugués comenzó la temporada con dudas, algunas de estas motivadas por sus problemas físicos; pero ha conseguido rehacerse hasta el punto de ser clave en los triunfos del conjunto del oeste de Londres.
Con una FA Cup y una Champions League en su haber, el jugador natural de Massarelos ha llegado a la Eurocopa como uno de los fijos en el esquema de Paulo Bento, donde ha demostrado su capacidad de liderazgo sujetando el centro del campo luso. Ciertamente, el mediocentro del país vecino ha llegado en un excelente momento de forma a la cita internacional y sus actuaciones han ayudado al conjunto ibérico a llegar a la semifinal de esta tarde.
Después de no haber tenido la oportunidad de disputar la finalísima de Munich al haber sido amonestado en el partido ante el Barcelona, el jugador de 29 años quiere resarcirse y sacarse, de alguna forma, una espina que tiene clavada en su interior, por lo que contra España jugará su última baza, la última carta que le queda para disputar una final y esta vez, representando a su país.
Entrando en materia, el jugador 'blue' tiene una gran oportunidad ante sí en el día de hoy. Meireles se debe a su equipo, mostrando compromiso defensivo e inteligencia táctica, dos cuestiones que deberá llevar a la práctica con tal de intentar frenar a Xavi, a Silva o a Iniesta. Cierto es que Joao Moutinho y Nani son quienes monopolizan la salida de balón en los contraataques portugueses, pero el excelente desplazamiento de larga distancia que Raul posee, puede convertirse en un arma de destrucción masiva para las espaldas de la defensa de 'la Roja' en cualquier contraataque.
El sacrificio de Xabi Alonso y Busquets con la defensa de Nani y Ronaldo en bandas, puede de esta forma abrir espacios para sus llegadas de segunda línea, con un potente golpeo de cara a portería. Su despliegue físico a lo largo de la zona ancha del campo de juego, permite a Meireles asociarse con facilidad con los jugadores de banda jugando en posición de volante y acumulando así hombres en zonas que pueden herir a la zaga española con superioridades frente a los carrileros. En el caso de llegar al tanda de penaltis, el luso asegura también sobriedad, entereza y seguridad en el lanzamiento.
Raul Meireles, puede ser en el día de hoy y cuando todos hablan de Cristiano y Nani por parte de Portugal y de los Iniesta, Silva o Xavi o el debate del falso '9' en las filas españolas; un invitado inesperado, un jugador determinante para el triunfo de su selección.
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