Siempre que observamos un torneo de categorías inferiores inevitablemente se nos van los ojos hacia dos tipos de jugadores: los que por su técnica o su corte 'se les ve' madera de futuros profesionales o, por los que su desarrollo físico, pueden jugar con ventaja a la hora de imponerse en esas zonas del campo donde el más fuerte da el primer paso.
Y Croacia cuenta con Mario Jelavic, que por su 1,89 podríamos pensar en incluirlo en el segundo grupo, más cuando descubrimos que juega de referencia en el ataque, pero que sin ser un prodigio técnico, huele a que será el próximo delantero de la absoluta en breve.
El hattrick en el clasificatorio ante Moldavia le puso en boca de todos los que siguen las categorías inferiores y, a título individual, a tener sus primeros minutos oficiales en el primer equipo del Hadjuk (tuvo algunos en el amistoso ante el Barça de hace un año también)... pero tambien para hacer que desde hace unos meses sea seguido por varios equipos de Bélgica (Anderletch), Alemania, Holanda (Ajax) e Italia (Sampdoria) provocando que el jugador esté postponiendo su renovación y haya despertado todas las alarmas en el histórico club croata que ni podría sacar partido deportivo a su perla ni tampoco económico, ya que sólo ingresaría por los derechos de formación, una cantidad muy inferior a lo que podrían sacar de tener un contrato más largo.
Entre los aficionados reina el pesimismo ante la situación que casi les asegura de que no podrán disfrutar mucho del delantero.
Jelavic, parece, que querrá aprovechar este Europeo primero, obviamente, para hacer un papel que ayude a su equipo a llegar lo más lejos posible en la competición, pero también para revalorizarse entre sus posibles pujadores o, en el peor de los casos, conseguir plaza definitiva en el primer equipo del Hadjuk.