Flan de chocolate, café y caramelo

Hace tiempo que andaba buscando una receta de flan que me tincara, osea que fuera simple, rica y con mucho gusto. Ojo que esta receta no e muy light pero igual puse la opción de reemplazar el azúcar por stevia ya que yo la preparé así y queda ultra rica y un poco mas liviana.

Generalmente no soy muy dulcera pero tenia todos los ingredientes necesarios para preparar este flan que tenía anotado en un cuadernito desde hace años y ya poh! Aproveché que a Fabien no le quedaban postres y que tengo sobre stock de leche líquida (las compré en promo y me fui al chancho parece con la cantidad) jejeje

No importa, después de este postre me queda 1 litro menos!

Ingredientes (para 8) :

1 litro de leche descremada
250 grs azúcar (o equivalente de stevia en polvo)
150 grs de cacao amargo en polvo
100 grs de chocolate en polvo ( Cola Cao, Milo, Poulain en Francia)1 cda de café instantáneo disuelto en 1/2 taza de agua o 1 expreso
8 huevos
1/4 taza azúcar para el caramelo

Paso a paso :

Pre calienta el horno a 200°C
En un sartén, coloca el 1/4 taza de azúcar y unas gotas de agua y revuelve con una cuchara de madera. Deja cocer a fuego medio hasta que se forme el caramelo (unos 3 a 5 minutos), una vez listo, retira inmediatamente del fuego y distribuye en toda la superficie de tu molde.

Coloca todos los ingredientes (leche, huevos, azúcar, chocolates y café), en una  juguera o bátelo con batidor eléctrico durante unos 5 minutos hasta que quede un poco espumoso en la superficie.

Ojo! que si tu juguera no es muy grande se puede rebalsar mientras bates, así que te recomiendo dividir tu mezcla en dos.

Agrega tu mezcla de flan al molde y hornea a “baño Maria” durante 40 a 45. Para probar si está listo, puedes pinchar con un cuchillo al igual que con los queques (bizcocho), y si sale seco es que está listo.

Dato: Desmolda mientras esté aun caliente para que el caramelo no se pegue en el molde o si no, déjalo enfriar completamente en el refri y antes de desmoldarlo pásalo por agua caliente o el fuego de la cocina (con mucho cuidado eso si), para calentar el caramelo.