¿Quién se resiste a unas ricas galletas para la hora del desayuno o la merienda? Pues si estáis pensando en hacer galletas caseras ricas, ricas, no perdáis esta receta de vista, porque es una masa fácil de manejar, y el sabor es.... ¿Cómo esplicar un sabor? Yo creo que el aspecto habla por sí sólo. De modo que ¡ánimo y manos a la masa! ¡¡No os arrepentiréis!!
Ingredientes
- 300 g. de manteca de cerdo
- 4 huevos
- 300 g. de azúcar
- ralladura de limón
- 1 sobre de levadura química
- 30 gotas de concentrado de limón
- 800 g. de harina de repostería
- mermelada de moras (ver receta)
Preparación
- Batir la manteca de cerdo hasta que quede en pomada.
- Añadir los huevos, azúcar, concentrado y ralladura de limón y batir de nuevo hasta que todos los ingredientes queden bien integrados.
- Tamizar la harina y la levadura y agregar al preparado anterior. Amasar muy bien hasta conseguir una textura suave y que no se pegue a las manos (dependiendo del tipo de harinas, quizás se necesite añadir algo más).
- Extender con el rodillo dejando la masa de 1/2 cm. de espesor, e ir cortando con un cortapastas.
- Colocar en la bandeja de horno sobre papel vegetal o silpat e ir haciendo en cada gelleta una hendidura en el centro con el dedo, o ayudados con un utensilio de un diámetro pequeño (yo utilicé un tapón de coca-cola).
- Ir echando cucharaditas de la mermelada de moras y meter en horno precalentado a 190º unos 10 minutos, o hasta ver que empiezan a dorarse.
- Sacar sobre una rejilla metálica y dejar enfriar. Una vez frías guardar en una lata y se conservarán un montón de tiempo (si no se comen antes :-)