Es época de mercadillos navideños.
Cuando el frío y la oscuridad llegan a Europa anunciando el invierno y la Navidad, las principales ciudades se visten de gala para sacar a la calle la magia de la luz y los mercadillos navideños.
Nos gustan , nos encantan aunque estén abarrotados: adornos para el árbol, figuritas para el belén, gorros con cantidad de diseños, digamos divertidos. Y los puestos de dulces típicos y de bebidas calientes para combatir las bajas temperaturas.
La bebida por antonomasia es el vino caliente especiado que, dependiendo de dónde lo tomes , recibe un nombre diferente.
En los mercadillos de España es menos popular pero según vamos adoptando costumbres de otros lugares, no dudo mucho de que ponto se pongan de moda "los fervidos" como decía mi padre que, por otra parte, no sería tan extraño porque toda la vida los hubo en la cultura popular.
Ingredientes
- Vino tinto de calidad aceptable 750 ml
- 80 g de azúcar moreno
- Corteza de una naranja
- Corteza de medio limón
- Una rama de canela
- Una pizca de canela en polvo
- Una pizca de clavo en polvo
- Una pizca de nuez moscada en polvo
- Dos estrellas de anís
Preparación
- Pon las especias y las cortezas en un cazo.
- Añade el vino y el azúcar.
- Remueve para integrar el azúcar y las especias.
- Pon a calentar, sin que llegue a hervir a borbotones unos 20 minutos.
- Cuela y deja reposar; templado se aprecian mejor las especias.