Tras el estreno de MIEL (28 de enero), hoy 4 de febrero llegan a los cines HUEVO y LECHE, dos obras imprescindibles para apresar el universo del poeta Yusuf, protagonista de la trilogía.
Los cambios económicos, sociales y culturales que se producen en las zonas rurales, el choque entre la tradición y la modernidad que atenazan al corazón del protagonista Yusuf (y, por extensión, a toda una generación en Turquía), el profundo significado de la relación entre madres e hijos de la cultura turca, el sentido del tiempo, la percepción y el descubrimiento de la vida a través del mundo físico pero también del sueño, que, como todo, afecta a la identidad y a las decisiones vitales... son los temas que convergen en la Trilogía y especialmente en HUEVO (la adolescencia del personaje de Yusuf) y LECHE (la edad adulta).
SINOPSIS HUEVO Yusuf acaba de graduarse en el instituto y su futuro en una pequeña ciudad de provincias es incierto. Su mayor pasión es escribir poesía y ha empezado a publicar algunos poemas en revistas literarias. De momento, sigue trabajando en la lechería que regenta su madre viuda, cuyo futuro tampoco está muy claro. Hasta ahora, la madre de Yusuf había volcado todas las atenciones en su hijo único. Zehra aún es joven y guapa y tiene una discreta relación amorosa con el jefe de estación de la ciudad. El hecho de que su madre tenga un amante y de que le hayan declarado no apto para hacer el servicio militar, debido a una enfermedad que padeció de niño, hace que Yusuf tenga aún más ganas de dar el salto a la vida adulta. ¿Podrá el joven Yusuf con los cambios que sacudirán su tranquila vida? ¿Podrá sobrevivir solo de la poesía y ayudando a su madre en la pequeña lechería? ¿O deberá mudarse a la gran ciudad o buscar trabajo en una de las fábricas que amenazan el hasta ahora impoluto paisaje?
SINOPSIS LECHE Al morir su madre, y después de años de ausencia, el poeta Yusuf regresa a la ciudad donde creció. Una joven llamada Ayla le espera en una casa medio derruida. Yusuf no estaba enterado de que una prima lejana llevaba cinco años viviendo con su madre. La presencia de Ayla le ayuda a canalizar, en parte, las emociones provocadas por la muerte de su madre. Pero ¿podrá Yusuf enfrentarse al sentimiento de culpabilidad que le invade después del entierro? Los objetos, los muebles de la casa materna, la cotidianidad, el ritmo sosegado de la provincia, los rincones llenos de recuerdos, la ciudad misma, todo lo que Yusuf quiso dejar atrás hace años, de pronto le parece maravilloso. El día que debe regresar a Estambul, Ayla le pide a Yusuf que realice el sacrificio que su madre no pudo llevar a cabo antes de morir.
"No solo vemos el mundo con los ojos, sino con los sueños. Las respuestas a nuestras preguntas existenciales no pueden estar limitadas al mundo físico que percibimos". SAMIH KAPLANOGLU.