El último informe de Rabobank International para el primer cuatrimestre de 2013, sobre las tendencias y las perspectivas del mercado mundial de vinos , se centra fundamentalmente en el tema del mercado mundial de graneles y los precios de esos vinos. El trabajo, difundido por el Observatorio Vitivinícola Argentino, señala que el consumo mundial de vino ha venido superando a la producción en los últimos 6 años, con inventarios al día de hoy de 75 millones de hectolitros inferiores a los máximos alcanzados en el 2006. Esto representó una caída aproximada del 40% de acuerdo a las estimaciones de la consultora.Según Rabobank, el consumo no puede continuar superando a la producción indefinidamente. Con la caída de la producción y la escasez de oferta, está claro que el consumo estará bajo la presión del aumento de los precios. Lo que es menos claro, según la consultora, es en qué lugar caerá el consumo y qué países serán los más afectados. Un vistazo a los precios del vino a granel de los principales países proveedores ofrece alguna idea sobre el impacto hasta la fecha. Aunque el envío de vino a granel ha ayudado a globalizar el comercio mundial del vino, el impacto de la escasez de suministros se ha hecho sentir de manera muy diferente entre las regiones productoras. Hasta la fecha, la mayor parte del impacto se ha concentrado en Europa y se ha sentido más dramáticamente en los segmentos de precios más bajos.
RUSIA Y AUMENTO DE PRECIOS:
Un factor clave en un intento de identificar el impacto potencial de la escasez de oferta en los patrones de consumo y los precios del vino es la reacción del mercado ruso. Rusia es el quinto mayor importador de vino del mundo y un mercado notoriamente sensible a los precios. Sus cuatro mayores proveedores son España, Italia, Francia y Ucrania. Rusia fue el cuarto mayor importador de vinos españoles en 2011, con más de 166 millones de litros, la mayoría graneles de bajo precio. Pero con el aumento en los precios del vino a granel español de casi 38% durante 2012, las importaciones disminuyeron en un 67%, lo que equivale a más de 110 millones de litros.
Acontecimientos recientes muestran que los compradores rusos han estado buscando activamente proveedores alternativos con costos más bajos, para llenar el vacío dejado por el granel español. Las importaciones rusas de Moldavia y Ucrania crecieron significativamente en 2012, pero como estos proveedores también se vieron afectados por la reciente baja cosecha es probable que tengan dificultades para mantener tales volúmenes. Con el debilitamiento del Rand (ZAR) los precios de Sudáfrica mejoraron y las importaciones rusas de ese país casi se cuadruplicaron. Del mismo modo, Rusia se convirtió en el mayor importador de vinos de Brasil en volumen en 2012 aunque pagando una décima parte del precio promedio de exportación del 2011. Si bien estos acontecimientos son dignos de mención, los aumentos de las importaciones procedentes de estos países sólo compensan una cuarta parte de la disminución de las importaciones de España. Incluso con la reciente noticia del levantamiento de la prohibición de las importaciones de vino de Georgia, no está claro si esto será suficiente para compensar la pérdida de volúmenes de España. Como todos sus mayores proveedores han experimentado un descenso de la producción en 2012 y están viendo un aumento en los precios del vino a granel, los importadores rusos se enfrentan a una decisión: buscar proveedores alternativos (Chile, Argentina, Australia) a precios más altos de lo que han estado pagando o aceptar una disminución de los volúmenes de importación de vino.
Fuente: Diario de Cuyo