(27/03/2012, EFE)
El nuevo presidente alemán, Joachim Gauck, eligió Polonia para su primera visita oficial y, como explicó hoy en Varsovia, lo hizo “de corazón”, dejando a un lado “cálculos políticos”, como muestra de su voluntad de trabajar para estrechar lazos entre los dos países centroeuropeos.
El jefe del Estado polaco, Bronislaw Komorowski, agradeció que Polonia sea el primer destino de su homólogo alemán, y subrayó este hecho como “indudable símbolo” de las buenas relaciones polaco-germanas.
“Indica que vamos mucho más allá de un simple proceso de reconciliación entre nuestras dos naciones”, añadió Komorowski.
Gauck también mostró su satisfacción por las fluidas relaciones entre ambos países, y aseguró que continuará trabajando para estrechar esos lazos.
En su comparecencia con el presidente alemán, Komorowski recordó que la “libertad” debe presidir las relaciones polaco-germanas, siempre “dentro del marco de una Europa unida”.
“Ambos (en referencia al presidente germano) sabemos bien cómo eran esos días en los que no había libertad en nuestros países”, afirmó Komorowski.
Joachim Gauck mantendrá posteriormente un encuentro con la presidenta del Parlamento polaco, Ewa Kopacz, y con el primer ministro del país, Donald Tusk.
Medios polacos destacaban hoy que Polonia sea el país elegido por Gauck para su primer viaje oficial, por delante de Bruselas y París, donde la campaña electoral aconseja aplazar visitas de estado.
Además, hace dos años, cuando Joachim Gauck aspiró por primera vez a la presidencia de Alemania, ya prometió que su primera visita oficial sería a Polonia.
Gran parte de la opinión pública polaca considera que las relaciones polaco-germanas atraviesan actualmente su mejor momento en la historia.
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