Dark Horse lo ha vuelto a hacer. Tras la magnífica labor de rescate de los comics clásicos de Conan que publicara la editorial Marvel, y añadir un notable corpus de nuevas historias al canon, el siguiente paso fue volver a presentar al público las aventuras del puritano Solomon Kane, otro personaje salido de la máquina de escribir del escritor texano Robert E. Howard. Dark Horse puso en la calle sendos tomos, uno con la reimpresión de las historietas en color del personaje, y otro con las que fueron originalmente impresas en blanco y negro. Ahora le ha tocado el turno al tercer mítico personaje howardiano, el rey Kull. Hace ya tiempo la editorial norteamericana viene reeditando los comics en color en unos tomitos que reciben el nombre de The Chronicles of Kull. Una de las ambiciones de los aficionados a la Fantasía Épica era ver recopiladas las aventuras publicadas originalmente como complemento en la revista en blanco y negro The Savage Sword of Conan. En este sentido, acaba de llegar a las librerías el primero de dos volúmenes impecables.
Por otra parte, Dark Horse sigue añadiendo nuevas historias de creación propia al mito. Tras The Shadow Kingdom, un primer arco argumental ya publicado en grapa mensual y posteriormente recopilado en tomo, ya está en la calle el primer número de la nueva miniserie de Kull, uno de los personajes más populares creados por el escritor Robert E.
Howard, que la editorial norteamericana Dark Horse acaba de poner en circulación. Gabriel Guzmán, antes visto en Predators, toma el relevo a Will Conrad al frente de la parte artística con un dibujo competente, pero más bruto que la elegante versión que ofreció Conrad. El ilustrador suaviza algunos aspectos que fueron criticados en su momento, como el aspecto nubio que se le dio al personaje de Brule, quien afronta una evidente evolución. Aún así seguro que todavía habrá quien se queje por el color de la piel. Al dibujo excesivamente burdo y en ocasiones descuidado y apresurado de Guzmán, tenemos que expresar nuestras reservas ante el guión de David Lapham, que aparte de Balas Perdidas no parece dar pie con bola en ningún otro de sus proyectos. Para The Hate Witch contruye una historia en la que el rey bárbaro tendrá que hacer frente a su pasado y retornar a su Atlantis natal. Habrá que esperar a ver cómo la desarrolla. Las portadas, horrorosas.Fran G. Lara