Los anuncios de la empresa John Lewis marcan siempre el comienzo en Inglaterra de las fiestas navideñas: algo así como en España el “Vuelve a casa por Navidad”, de turrones El Almendro. Ciertamente, es una campaña muy esperada, que se ha convertido en el evento publicitario más importante de la Navidad inglesa, pues sus anuncios son vistos en todos los hogares, descargados millones de veces en Internet y comentados continuamente en los medios de comunicación.
Hace dos años, el anuncio “The Long Wait” mostraba la larga espera de un niño que contaba ansioso los días que faltaban para la Navidad. El emotivo golpe final conmovió a las audiencias y alcanzó más de 6 millones de visitas en la web. Lo publiqué entonces en este blog, con un breve comentario. El año pasado, la campaña “The journey” nos contaba la bella historia de un muñeco de nieve que afrontaba un duro viaje para conseguir guantes y sombrero para su frágil compañera: logró 4’5 millones de visitas y fue también comentado en este blog.
Este año, la compañía ha apostado por el dibujo animado y en el spot ha contado un precioso cuento titulado “El oso y la liebre”. El rótulo inicial nos introduce en el clima de un cuento de hadas: “Había un animal que nunca había visto la Navidad”. Al principio no sabemos a qué se refiere. Vemos a los dos animales en alegre paseo por el bosque: sin duda, comparten una sincera amistad, a pesar de ser muy distintos. Con la caída de los primeros copos, la liebre se pone triste: sabe que su amigo comenzará a hibernar dentro de poco tiempo, y que –una vez– más no podrá asistir al encanto de la Navidad. En efecto, el oso empieza a dar sus primeros bostezos mientras el resto de los animales se prepara jubiloso junto al gran árbol navideño. La liebre intenta animar a su cada vez más somnoliento compañero, mientras pájaros, ardillas, mucetas y todos los animales del bosque colaboran en la decoración del árbol. La tristeza y el abatimiento que siente la liebre están perfectamente reflejadas en su rostro animado, de modo que el espectador no puede sustraerse a la sincera emoción de ese instante.
Mientras las criaturas del bosque celebran la Navidad, el oso duerme plácidamente en su cueva. Todo parece indicar que, una vez más, no podrá asistir a esa fiesta. Pero el amor es ingenioso: impulsada por el afecto, la liebre tiene una idea brillante y lleva a su amigo un pequeño regalo: algo en apariencia sin importancia pero que acabará en un hermoso desenlace. (Prefiero no destripar el final, y que puedas descubrirlo por ti mismo).
Como señalaba Craig Inglis, director de marketing de John Lewis: "Queríamos que nuestro anuncio reflejara la importancia de encontrar el regalo adecuado para los amigos y seres queridos. A través de la animación hecha a mano, hemos podido evocar la nostalgia que siente la liebre y transmitir ese mensaje”. No en vano el eslogan final nos anima a “dar a alguien una Navidad que nunca olvidará”. Un mensaje preciso que encuentra en la canción “Somewhere Only We Know”, cantada por Lily Allen, un marco musical de increíble emotividad. Por eso ha alcanzado más de 11 millones de visitas en menos de un mes.
¡Felices fiestas! Y que todos sepamos dar, con nuestro afecto, lo mejor de la Navidad.
Si os ha gustado, aquí podéis ver el magnífico "Cómo se hizo" (3 minutos):