Aunque ya hay presencia de pollos volantones en la campiña gozoniega desde hace unos cuantos días, semanas incluso, en esta época su abundancia se multiplica. Constituyen la primera generación de los que nacerán este año. Muchas de las especies que anidan en Gozón lo hacen por partida doble, y de inmediato emprenderán la labor de traer al mundo una segunda familia, que volará allá por el mes de julio. Es la mejor forma para ellos de asegurar la supervivencia, ya que sólo una pequeña parte de los pequeños sobrevivirá hasta el año próximo.
