Lo que hace que esta historia sea, junto la Saga de Korvac, la mejor historia de Los Vengatas es que es una tragedia griega. Los temas de
La Última Historia de Los Vengadores son el pasado, la familia y el heroísmo, lo relevante de los protagonistas es su sufrimiento, sus debilidades y su valentía y, el tono, es épico. Por ello no extraña que este cómic sea muy intenso, emocionante y glorioso. Por ello sea seguramente el mejor cómic de P. David. Su guión es magnífico porque su futuro decadente del UM es fantástico y está presentado fluidamente, porque su elección de los personajes es sagaz, porque el tratamiento de estos es magistral (sobresale Ojo de Halcón, temerario, rebelde y carismático como nunca), como los héroes trágicos, sus pasiones, miedos y vicios sólo agigantan su heroísmo, porque el motor de la historia es sencillo pero potente, porque el desarrollo es brillante, porque la pelea final es épica y cruenta, por ello de las más verosímiles que se han publicado (para mi no hay ninguna mejor), y es 1/3 del cómic, porque es muy acertada la decisión de que la narre en 1º persona el supervillano, Ultrón 59, y porque, por ser una tragedia griega, es un análisis del género tan genial como es
La broma asesina.
El problema de los héroes [es que]
su única finalidad en la vida es frustrar a los demás. No trazan planes. No idean estrategias. No actúan. Sólo reaccionan… Sin villanos los héroes se estancarían. Sin héroes los villanos dirigirían el mundo. Los héroes cultivan la moral. Los villanos la ética del trabajo… Los villanos se ocultan. Los héroes no. Los villanos traman. Los héroes esperan. Por último, y no por ello menos importante, la tragedia clásica también viene porque es un cómic clásico. Lo cual también es metacómic pues
La Última Historia de Los Vengadores se publicó por 1º vez en un momento en que el héroe clásico (el moderno, el de la mal llamada Edad de Plata) era despreciado y se pretendía sustituirle. En ese contexto P. David le levantó este doble homenaje. Por un lado escribió una historia basada en elementos clásicos, por el otro hizo que esta ensalzase a los héroes clásicos en cuanto que son esperanza y ejemplo. Por ello la moraleja es que nunca se debe permitir que se pierdan.
A ti que te haría abandonar Capi? La muerte. Quizás. Dudo que Brubaker haya escrito un diálogo mejor al Capi.Este aire trágico, es decir, exagerado, sobrehumano, justifica que se encargase el dibujo a Olivetti, sin embargo no fue una buena idea del todo pues este entonces era un novato así que la cosa le vino grande. Olivetti aquí se presenta como una síntesis de Bisley y Sienkiewicz pero mucho más torpe y mucho menos talentoso que sus maestros. Por ello, aunque sus poses retorcidas, sus gestos exagerados y sus cuerpos inhumanos son ideales para la historia, su tosquedad anatómica, su impericia con la perspectiva, su rudeza narrativa y su color pesado no están a la altura de las pasiones y la épica de la historia. Su trabajo no es malo pero, además de un estilo singular y nada pop que evidenciase lo especial de este cómic, se necesitaba más competencia y habilidad tanto dibujando como narrando.
Así, teniendo en cuenta su calidad, no extraña que al final esta historia viejuna pero magnífica haya sido reeditada por Panini en MGN a un precio imbatible, sin duda por la peli. Al dibujo de Olivetti le viene mejor ese formato (en origen el formato de esta historia es el desgracidamente extinto prestigio) y la historia es tan autárquica y buena que es ideal para el no iniciado o el ocasional.
Odio que el lenguaje publicitario contamine el lenguaje cotidiano pero en este caso no puedo evitarlo. Si sólo puedes comprar 2 cómics de superhéroes este año que uno sea La Última Historia de los Vengadores. Si sólo puedes comprar 2 cómics de superhéroes esta década que uno sea La Última Historia de los Vengadores. Si sólo puedes comprar 2 cómics de superhéroes este siglo que uno sea La Última Historia de los Vengadores. El trabajo de P. David es fabuloso. Esta sí que es la historia definitiva sobre el épico enfrentamiento de Los Vengadores con Ultrón.