En el supermercado haciendo compras inesperadas. (Winslet, Griffith y Brolin)
Irrumpe de modo casi violento en sus no muy halagüeñas vidas Frank Chambers amorosamente interpretado por Josh Brolin. Eureka! Todo cambia.Melancólica y optimista a la vez. Bien actuada (Brolin Winslet Griffith) lo máximo.Con una historia de género bien manejada aunque llena de estereotipos visuales, Reitman sale casi bien librado en esta ocasión con un algunos problemitas en el desarrollo. Puede ser que el material literario tenga gran parte la culpa. Un príncipe que nace de la ralea, un diamante en bruto, una promesa inconclusa se resuelve con una forzado final folletinesco. Antes todo ha sido tensión, temor soterrado, que se va mejorando a cuenta gotas pero de manera algo forzada. Las feministas de seguro tendrán de que hablar de como se resuelve el conflicto. De quien lleva las riendas y de quien es capaz de sobreponerse gracias a quien le apoya. Las apariciones de los vecinos casi cronometradas que aderezan el suspense harto se han visto en el cine de esos lares.De todos modos, los actores salvan la jornada laboral.Revista Cine
Una mujer y su único hijo, solos. El padre se ha ido y ahora tiene una nueva familia. El pre adolescente tiene la valentía en ciernes que crece como la espuma y que sólo los débiles en apariencia suelen tener. La madre sufre de los nervios, la separación ha acabado con su psiquis. De repente, aparece la amenaza...Este es el prólogo de Labor Day del director Jason Reitman (Juno, Up in the air) del film basado en la novela de Joyce Maynard, que retrata la jornada de todo lo que pasa en un fin de semana en la familia disfuncional de Adele y Henry Wheeler, interpretados por Kate Winslet y Gattlin Griffith.