Dijo Antonio Gala, tras el estreno de “La pasión turca” de Vicente Aranda, que era “una historia de cama y encoñamiento superficial que no tiene nada que ver con mi novela”. Juan Marsé, con cinco títulos propios adaptados por el tórrido director de “Amantes”, decidió subirse al carro y expresar también su parecer sobre las aptitudes cinematográficas del realizador barcelonés: “yo jamás he dicho que Aranda traicionara mis libros; he dicho lisa y llanamente que sus películas son malas, y son malas no porque se parezcan poco o nada al original literario (...) sino porque, sencillamente, están mal hechas”. Arturo Pérez Reverte, Almudena Grandes o Manuel Vázquez Montalbán también han hecho público en varias ocasiones, aunque de manera más discreta, su descontento con las adaptaciones de sus obras. Aunque lo cierto es que continúan con la práctica porque la venta de derechos les reporta más beneficios que los beneficios editoriales. Pero en una cinematografía bulímica de adaptar obras literarias (1.117 adaptaciones registradas en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes), aún hay grandes títulos que no han dado el salto al celuloide. Aquí va la primera entrega.
1. La sombra del viento, de Carlos Ruíz Zafón.
En el 2005 saltaba la noticia. El niño mimado de la filmografía española, Alejandro Amenábar, estaba preparando la adaptación de la novela tras el éxito de “Mar adentro”. ¡Eterno misterio en torno a los futuros proyectos del apadrinado por Cuerda! Se trataría de una superproducción yanqui, rodada en clave de thriller-musical a finales del 2006. La estrella protagonista, un Richard Gere en la cresta de la ola por su descafeinada participación en el taquillero “Chicago” de Rob Marshall. La noticia nunca llegó a película y se quedó en una pura inocentada.
Por sorprendente que parezca, el best-seller internacional, con más de diez millones de copias vendidas en 36 idiomas, no va a ser adaptado por el momento porque “no está en venta para el cine”. En una entrevista que el novelista concedió desde Los Ángeles, donde ahora trabaja como guionista (qué paradoja), Zafón admitió que “se puede permitir el lujo de decir que no” y que “de hacerse la haría yo, porque sé que es un proyecto complicado y tendría que tener garantías”. Ofertas, por el momento, no le faltan.
2. Fin, de David Monteagudo.
Críticas, reseñas y foros coincidían en apuntar el especial carácter cinematográfico de este texto tras su exitosa publicación en el 2009. Muchos señalaron las similitudes de la primera novela del gallego con el último relato de M. Night Shyamalan, “El incidente”, y con la ardua y directa narrativa del americano Cormac McCarthy en su “La carretera”, cuya adaptación dirigida por John Hillcoat llegaba hace ya un año a las carteleras españolas. Otros tantos se llevaron las manos a la cabeza con tan osado paralelismo. Pero la verdad es que el pulso narrativo de “Fin” es innegable y en fillmin tenemos constancia de que Acantilado, la editorial catalana que la lleva, tiene varios frentes de negociación abiertos para la venta de los derechos de la novela.
3. La pell freda, de Albert Sánchez Piñol.
Una isla hostil, criaturas extrañas que emergen desde el océano, aventuras en el sentido más clásico. Suspense mezclado con sexo, explosiones y exotismo, los ingredientes más buscados por las súper-producciones. La adaptación de Sánchez Piñol ya tiene tanto título, “Cold skin”, como póster (abajo). Hace un par de años una productora española con mucha vista, Kanzaman, compró los derechos de la novela para llevarla a la gran pantalla a corto plazo. Y si el guión pasó por las manos de los hermanos Álex y David Pastor ("Carriers"), finalmente acabó firmado por el también español Jesús Olmo, co-guionista de “28 semanas después”. Eso sí, 25 millones de euros de presupuesto hicieron pensar en un director de talla internacional, David Slade (“Hard Candy”), para asegurarse el blanco. “La pell freda” arrancará cuando el también realizador de “30 días de oscuridad” finalice el rodaje de “Eclipse”, la tercera entrega de la Saga Crepúsculo. Islandia será el escenario que acoja a un elenco internacional de primera línea del que no se conoce aún ningún nombre.
4. La catedral del mar, de Ildefonso Falcones.
Hace pocos meses, con motivo del lanzamiento comercial de la novela en el mercado latinoamericano, el director editorial de Random Hause Mondadori anunció en rueda de prensa que se habían vendido los derechos de “La catedral del mar”. Efectivamente se está preparando la adaptación de este thriller histórico ambientado en la próspera Barcelona del XIV, pero no se han difundido todavía los nombres del guionista y del director de la película. Otro título que carerá en poco tiempo de nuestro ránking.
5. Mecanoscrit del segon origen, de Manuel de Pedrolo.
Aunque la exitosa y postapocalíptica novela de Pedrolo ya viviera en el 85 una adaptación a miniserie televisiva, dirigida por Ricard Reguant y producida por la Televisión Autonómica Catalana (TVC), nunca había dado el salto al a gran pantalla. Hace pocas semanas el director de la productora Antártida, Carles Porta, confirmó los rumores que corrían desde hace poco más de un año: Bigas Luna (“Jamón, Jamón”) volverá a sus orígenes fantásticos con la adaptación de este relato, que se rodará entre Barcelona, el Llobregat y Lleida. Porta ha comunicado que el proceso de cásting dará comienzo en dos semanas. Allí se buscarán a una niña de 14 años, Alba, y a un niño de unos 9, Dídac, que “debe ser negro y norteamericano, para jugar con el simbolismo de que tiene que salvar el mundo, como Barack Obama”, dijo el productor. Sutil y elegante metáfora que debe pretender añadir niveles de lectura a la obra originall. Eso sí, nunca sabremos qué opinión le merecería el cambio al propio Pedrolo.