Artículo original escrito por Jero Sánchez. Sígueme en Twitter.
Las 4 “W” de la productividad personal
No lo voy a negar, alcanzar un cierto grado de eficiencia en la productividad personal no es sencillo. Ni siquiera con la ayuda de métodos tan prácticos y expeditivos como GTD. Generalmente requiere de una gran dosis de fuerza de voluntad –yo lo llamo constancia–, y mucha práctica.
En los casi 200 artículos que ya he escrito he hablado de muchas técnicas, trucos, herramientas y hábitos que nos ayudan día a día a ser más productivos. Sin embargo, al final, todo se reduce a tener meridianamente claro cuáles son las que yo llamo cuatro “W” que definen nuestra productividad.
Where (Dónde). Quizá sea la más importante de las cuatro, pues define el o los objetivos finales que perseguimos. Si no tenemos claro hacia dónde nos dirigimos, difícilmente podremos enfocar nuestro esfuerzo de forma productiva. Generalmente el “where” lo establecemos mediante metas a largo plazo, que son luego descompuestas en objetivos a medio y corto plazo para poder crear los proyectos correspondientes.
When (Cuando). No basta con saber hacia dónde vamos. También debemos saber en cuánto tiempo queremos estar ahí. Por ejemplo, seguramente no deberemos poner en marcha los mismos proyectos si queremos retirarnos a los 50 años que si queremos esperar a los 65. Dependiendo de lo ambiciosos que seamos, el “cuando” puede condicionar profundamente el “qué”, e incluso hacernos replantearnos seriamente el “dónde”,sustituyéndolo por otro más realista.
What (Qué). Una vez establecido el rumbo –dónde–, y en cuánto tiempo queremos estar ahí –cuándo–, lo siguiente es definir qué nuevos hábitos debemos desarrollar –o eliminar por otros mejores–, qué herramientas y técnicas tendremos que utilizar, y quizá lo más importante, qué proyectos debemos emprender. En resumen, el “qué” no es otra cosa que nuestro plan para que las cosas se hagan realidad.
Who (Quién). Por último, no debemos olvidar los “quién”. Ningún plan puede llevarse a cabo de forma individual. Tenemos que decidir quién debe hacer qué y cuándo. No se trata aquí de utilizar a las personas como máquinas para que hagan nuestra voluntad, sino de ser conscientes de cómo su ayuda encaja en nuestros planes, siempre buscando relaciones ganar-ganar en las que todos salgamos beneficiados.
Y tú, ¿siempre tienes en cuenta las 4 “W” de la productividad? ¿Crees que falta alguna? Comparte tu opinión con nosotros en un comentario.