En Gozón no se encuentra ningún odonato invernante, así que la temporada comienza con la aparición de las primeras especies, la más temprana de las cuales es siempre uno de los caballitos del diablo rojos, el bonito Pyrrhosma nymphula. Hoy pude detectar los primeros ejemplares en uno de sus enclaves habituales del concejo, en Iboya.
Cada año los detecto antes, aunque lo cierto es que realizo búsquedas específicas para ello, así que no sabría decir si su emergencia se ha adelantado. Es probable que puedan aparecer ya a finales de marzo, ya que estamos en la primera semana de abril y había ya bastantes ejemplares.
Muchos invertebrados se aparean ya durante los primeros días de su vida adulta, ya que esa es la principal función de su etapa como imagos: reproducirse. Así, pude registrar ya un buen número de tándem.