La semana pasada os comentaba qué plantas medicinales era mejor escoger según los problemas que querías tratar, hoy, os traigo cuatro que para mí son imprescindibles. Hablo de la lavanda, la caléndula, la menta y la manzanilla.
Aunque existen muchísimas plantas medicinales, y lo cierto es que me gusta tener plantadas muchas más, estas son permanentes en el huerto. Los motivos son:
- Son muy fáciles de cuidar
- Ayudan en el control de plagas (puedes echar un vistazo a este post que hicimos hace un tiempo en el que hablamos de cómo diseñar el huerto para prevenir plagas utilizando aromáticas).
- Son muy fáciles de preparar.
- Cubren un amplio abanico de problemas comunes: con estas 4 plantas tengo para aliviar dolores de cabeza, hacerme infusiones relajantes muy efectivas antes de ir a dormir, aliviar dolores de estómago, aliviar dolores menstruales, hacerme bálsamos para quemaduras y heridas, las puedo usar como antiinflamatorio y hasta las uso para aliviar la congestión nasal. No está nada mal, eh?
Así que he hecho 4 fichas que puedes descargarte y guardar, en las que se detallan las propiedades de cada una de ellas y cómo se cultivan.
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¿Y tú? ¿ya tienes un huerto medicinal? ¿Qué plantas son las que más utilizas?
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