Me voy enterando que Brasil tiene leyes contra las grandes industrias de alimentación para poder preservar sus alimentos naturales. Leo más a fondo lo que esto significa y me gusta más y más.
Por ejemplo, todos los niños que van a la escuela tienen que recibir una comida ahí. Esta comida debe ser, por ley, 70% de alimentos naturales mínimamente procesar y el otro 30% de granjas y comunidades locales.
Claro que allá también tienen todos los problemas que tenemos aquí y en todas partes con la televisión, internet, revistas, etc. Toda esa publicidad, todos esos productos, toda esa "vida fácil". Pero espero que estas medidas les empiecen a surtir efecto, que eduquen a la par y que nos sirva de experiencia para otros lugares.
Escrito por Fernanda Rodríguez del Peón