Listen to me - Manuel Vilas

Hay dos cuestiones importantes en el último libro de Manuel Vilas (Listen to me, La Bella Varsovia, 2013). La primera: el sentido del humor. La segunda, y no es baladí, es la chaqueta con la que Vilas posa en la foto de la portada. Me explico.
La trayectoria de Vilas alimenta una voz propia construida con esfuerzo y talento, basada en muchas ocasiones en un lenguaje directo, una pasión por lo cotidiano, por la humanidad, por el arte pop, que toma su máxima expresión en este último libro, un volumen urgente, extraño, constituido por los estados de Facebook que Vilas ha escrito en su muro en los últimos años.
Qué duda cabe, armar un libro con fragmentos misceláneos es un experimento que solo está al alcance de editoriales valientes. La Bella Varsovia, comandada por Elena Medel y Alejandra Vanesa, han apostado fuerte para hacerse con los servicios literarios de un primer espada como Vilas. Supondrá una exposición potente para la editorial, camino de la consolidación en el mercado poético español.
El punto álgido de este libro, además de su juego poético y de su riqueza literaria, estriba en la utilización de diálogos y conversaciones con personajes míticos, desde Dios, hasta Lou Reed (recientemente fallecido), pasando por Bob Dylan o Jonhy Cash. Una declaración de filosofía vital no exenta de crítica social, de furibundos ataques políticos, velados siempre detrás de un aparente estado de frivolidad permanente, un detalle clásico en su obra poética (Calor, Resurrección, Gran Vilas o Amor, editadas en Visor en los últimos años).
En cambio, nadie puede posar en la portada de su libro con una chaqueta tan sumamente luminosa, una chaqueta colosal, elegante, la mejor de las chaquetas que el hombre ha conocido nunca. Hasta Dios y, tal vez, Lou Reed querrían una como la suya. Nadie puede vestir esa chaqueta y pretender que su obra poética resalte por encima. Es imposible. No está al alcance, si quiera, del bueno de Manolo.