Como cada temporada desde principios del mes de abril las lavanderas boyeras Motacilla flava han ido ocupando los prados del concejo de Gozón. Es una de las aves más llamativas del concejo, por su preciosa mezcla de colores muy vivos y llamativos: verde, amarillo y gris azulado.
Con un buen puñado de subespecies, la que se encuentra en la Península Ibérica es la subs. iberiae, cuyas características más destacadas son la garganta blanca y la lista superciliar, que es estrecha y normalmente no llega hasta la base del pico. El domingo pasado localicé varios machos en la zona entre Moniello y Bañugues, un buen área para observarla.
Este de las fotos que localicé posado en las rocas del acantilado se trata probablemente de un macho adulto, las manchas de las coberteras tienen un tono amarillento y el amarillo del pecho es muy vivo.
Este otro que localicé encima de un seto tal vez sea un macho de segundo año, las coberteras son más pardas, con los bordes de un tono marrón y el amarillo inferior es menos vivo.
La lavandera boyera se llama así por su costumbre de acompañar al ganado en sus áreas de invernada en África. Pronto empezarán a hacer sus nidos, ubicados bajo la maleza en el suelo o en una cavidad del terreno. Como todas las lavanderas, la boyera se alimenta de insectos.