Revista Cine
Me había propuesto escribir unas notas sencillas sobre esta película sin hacer la más mínima mención a “El orfanato”; pero ya ven, amigos lectores, mis buenas intenciones no han sido capaces de ir más allá de la segunda línea... Chistes malos aparte, puedo decir, sin temor a errar, que la referencia no es exclusivamente atribuible a mi responsabilidad, sino que viene inducida por el equipo de promoción del film, que ya se encarga de recordarnos, en todo formato y soporte disponibles, que son las gentes que promovieron aquella cinta los mismos que se han encargado de levantar este proyecto. “Los ojos de Julia”, que a tal título responde la cinta de la que hablamos (y que, ya ven, después de casi ocho líneas, aún no habíamos mencionado...), se trata, pues, de un film de suspense, español por más señas, y que, bajo la dirección del joven Guillem Morales, lleva a la pantalla una historia de ese terror basado en los elementos canónicos del género: incertidumbre y amenaza bien mezcladas y dosificadas. Nada nuevo bajo el sol, pero tampoco creo que sea preciso.
Aunque Belén Rueda, protagonista omnipresente a lo largo de todo el metraje —y candidata a convertirse, a base de repetir perfil, en la reina del terror hispano—, no sea Audrey Hepburn ni Ingrid Bergman, el film desprende, en su tronco argumental, efluvios inequívocos a precedentes tales como “Sola en la oscuridad” (no en balde, es la ceguera un leit motiv temático sobre el que gira todo el despliegue de la trama), o, más atrás aún en el tiempo, “Luz de gas” (con su paulatino cierre de círculo amenazante alrededor de la figura de la protagonista), si bien se distingue de ambos en su factura visual y su ritmo narrativo, plenamente acordes con este tiempo volátil y acelerado en que nos ha tocado a todos movernos, cada cual, obviamente, en lo suyo (los cineastas, haciendo sus películas; y los espectadores, intentando no dejarnos arrollar por ellas...). En todo caso, y tras su buena acogida en el Festival de Sitges, donde tuvo su premiere, las perspectivas comerciales de la cinta pintan de un color tremendamente halagüeño. Y no hará falta esperar mucho para comprobarlo: el viernes, estreno en las pantallas comerciales.
* APUNTE DEL DÍA: disponible en Suite 101 nota de preestreno de "Ché, un hombre nuevo", un interesante documental de Tristán Bauer. El enlace, aquí.
* Apuntes sobre el cine que viene LI.-