Tras ocho partidos sin ganar, el Leicester City FC ha dado vuelta la baraja y ha logrado una gesta impensable, como si hubieran hecho un pacto con el diablo, el mes de abril estaba siendo alucinante, todos los partidos que se habían jugado en sábado habían acabado en victoria.
El día 4 ganaron 2-1 al West Ham United, el 11 de visitante al West Bromwich 2-3, el 18 2-0 al Swansea y el 25 al Burnley por 0-1. Ahora bien, el partido con el Chelsea, lamentablemente, no se jugó en sábado...
La derrota ante el equipo de Mourinho fue un frenazo para la salvación de los dirigidos por Nigel Pearson y pero supuso el paso definitivo para que los "blues" ganaran la Premier League. Ahora bien, volviendo a la senda de triunfos en días sábado, el Leicester le metió un contundente 3-0 al Newcastle United y se colocó 16º en la clasificación.
Los últimos tres encuentros que les quedan por jugar serán: este sábado ante un Southampton que necesita los puntos para meterse en Europa, el siguiente ante el Liverpool que si no sigue puntuando seguirá fuera de la "zona Champions" y con quien empataron 2-2 en la primera parte del campeonato.
La última jornada liguera será el domingo siguiente ante el QPR que tendrá pie y medio en el descenso a menos que mejores sus registros y que puede suponer su salvación por la falta de entrega de su rival.