Veo las metáforas sucederse y cosas in-creibles a-parecer en el escenario, es el diálogo entre esos elementos, curvas e instantáneas. Mágica está llena de ese juego, o por lo menos así la viví yo, en donde la mayoría de comentarios, movimientos, gestos, escenas, merecerían ser pausados para desentrañar el sentido que esconden, para saber si se trata de algo literal o hiperbólico. Por eso siempre se está transcurriendo por una doble o triple o cuádruple historia, sobre el camino del humor bien diseñado y unos personajes que se aprovechan de sí mismos para dialogar en ambos planos, el de su actuación y el que ella misma deja entredicho en forma de gesto, apenas insinuado.
Y no podría ser otra cosa que eso mismo, cruces infinitos entre personalidades y situaciones que aunque no dejan de ser un tanto 'típicas', o tal vez por eso mismo, permiten la explosión de las máximas potencialidades de los personajes. Conflictos, tensiones y un toque de absurdo me mantuvieron, con mi acompañante, atento y sonriente la mayoría del tiempo. Y luego, después de todo, es gratificante ver ese abrazo, esa formación de agradecimiento de los actores que hace unos minutos eran otros, los personajes; su sonrisa y sus miradas cazadoras de aplausos y nerviosamente satisfechas son el broche de oro, cuando la obra se vuelve realidad.
Muy recomendable (aunque no me guste el rótulo).
Dramaturgia y dirección: William Prociuk
Elenco: Marcelo Pozzi, Natalia Salmoral, Ezequiel Rodríguez, Lucrecia Oviedo, José Formento, Julián Calviño, Victoria Mammoliti, Eduardo Iacono
Teatro: La Tertulia - Gallo 826 - 6327-0303
Funciones: Sábados, 23hs