Hoy en día todo el mundo ha visto budas en tiendas de decoración, ha oído hablar de las bondades de la meditación, conoce algunos aspectos básicos de la filosofía oriental… Por su colorido y su influencia en el arte actual, los mandalas no son diferentes y es extraño encontrar artistas (e incluso personas sin demasiadas inquietudes creativas) que desconozcan esta peculiar forma de arte.
La artista Kathy Klein se basa en las palabras en sánscrito ‘dān’ (el que da) y ‘mālā’ (guirnalda de flores) para crear su peculiar arte con flores: el Danmala, una forma de arte efímero que se conserva para siempre mediante coloridas fotografías.
“Mandala” es una palabra de origen sánscrito que significa “círculo”. Básicamente consiste en una forma circular compuesta por elementos geométricos concéntricos y organizados en diversos niveles. Las formas básicas más empleadas para dibujar mandalas son triángulos, cuadrados, círculos y rectángulos, y en ellas se basa Klein para seleccionar los elementos que conforman cada una de sus obras.
Pero lo que más sorprende de las mandalas es el mito que las rodea: se dice que dibujar mandalas ayuda a la concentración y el desarrollo de la mente, puesto que pintarlas no solamente es hacer arte sino que es una forma más de meditación. La mayoría de las culturas poseen configuraciones mandálicas, frecuentemente con intención espiritual: la “mandorla” del arte cristiano medieval; ciertos “laberintos” en el pavimento de las iglesias góticas, los rosetones con sus vidrieras… ¡y con la idea de Katy, incluso en los fruteros y floristerías!Alejándonos del aspecto más ‘espiritual’, pintar mandalas es una poderosa forma de potenciar la creatividad y la concentración, además de la relajación. Muchos profesores recomiendan utilizar en clase mandalas para niños, que son más fáciles de colorear y comprender. De esta manera los pequeños mejoran su atención y psicomotricidad fina de una forma divertida, además de aprender la discriminación de colores y fortalecer su creatividad.
Y vosotros, ¿habéis coloreado dibujos de mandalas alguna vez?
¿Creéis que realmente fomentan la concentración y la meditación o solamente es una leyenda urbana?