Después de poner pausa su relación con Mary Jane, Peter Parker busca volver a las andadas como Spider-Man y así encontrarse consigo mismo. Pero lo que no sabe es que descubrirá cosas nuevas sobre el poder que le ha sido otorgado y se encontrará con villanos diferentes a los ya vistos.
La crítica
Durante los 90, Spider-Man pasaba por una mala época: había entrado en un pozo sin fondo del cual no salía. La casa de las ideas había encasillado al personaje después de haberlo casado con MJ. A comienzos del 2000 volvió a empezar la colección con otra visión, con el fin de devolverle la gloria al que, seguramente, sea el personaje más querido de todo Marvel.
La reconstrucción comienza con un nombre: Joe Straczynski. El guionista parte, como punto de partida, de la separación de Parker y MJ para dar rienda suelta al personaje. Nos ofrece lo necesario para que cojamos con ganas cada número del hombre araña, no solo utiliza recursos que ya han sido previamente utilizados, le da a Spider-Man una profundidad que lo acerca más al espectador, lo humaniza aún más.
Lo primero que hace Straczynski es revisar el origen del superhéroe; revisar, que no reinventar. ¿Cómo? En la ecuación mete a un nuevo personaje que da motivos a Peter Parker para replantearse sus orígenes, cómo fue concebido su poder y si realmente es la araña la que le ha dado el poder o la radiación que ésta portaba.
Aprovechando lo anterior, el guionista crea al villano Morlun, el cual se mueve por el origen de Spider-Man: la araña. Morlun es un villano diferente a lo visto hasta ahora: incansable, insistente e incluso imparable. En esta ocasión, Spider-Man debe de exprimirse al máximo para dar todo lo que tiene, para explotar todo su potencial y vencer al villano que se le presenta, aunque parezca algo imposible.
Pero Straczynski no solo renueva al personaje de Spider-Man, renueva a Peter Parker. De hecho, se podría decir el guionista le da más vida al propio Peter. Parker se cuestiona sus siguientes pasos, qué debe hacer y cómo debe hacerlo, tanto en la parte más personal, con sus relaciones como en la profesional, ¿cómo puede ayudar a su comunidad sin ser Spider-Man?
Lo mejor de esta historieta es algo que en toda la historia de Spider-Man no ocurre y que, de repente, Straczynski rompe con ese mito (SPOILERS). El evento que tiene lugar en este tomo, cambia por completo la vida de Peter Parker como Spider-Man y, además, le da un toque diferente al personaje. Algo que tenía que haber ocurrido muchos números atrás ocurre en el momento correcto y nos hace empatizar muchísimo con la situación y sus personajes. Tal vez sea lo mejor de todo el tomo.
Eso sí, no todo el mérito es del guionista, aunque hace un gran trabajo en el renacer del personaje, parte de este mérito es del gran dibujo de John Romita Jr. Aunque el dibujo tiene mucha calidad, me siento algo contrariado al respecto, puesto que tan solo quiero ver sus escenas de acción. Romita Jr. dota al cómic de escenas de acción espectaculares, te meten de lleno en la pelea y no cuesta nada seguirlas. En contraposición, el dibujo del día a día de Peter y los suyos se torna algo repetitivo. Vemos el mismo dibujo que en 'Kick-Ass' (de hecho hay un personaje que es clavado) y el estilo de dibujo de los personajes no me acaba de convencer. Me gusta su estilo, no me parece malo, pero encuentro que los personajes pecan de falta de toque personal, es como si se contuviese para dar rienda suelta a su talento solo cuando Spider-Man entra en escena.
En resúmen: si eres un primerizo de Spider-Man, sigue la colección Marvel Saga de Panini porque conocerás una de las mejores etapas del hombre araña. Empatizarás con Peter y sus problemas y disfrutarás de esas buenas peleas que te puede ofrecer el personaje de la casa de las ideas.
Edición
- Edición España: Panini Comics
- Formato: Cartoné, 216 págs. A color
- Precio: 15,00 €