Hubo suspenso en el último partido del sábado en el Masters 1000 de Madrid; pero no hubo sorpresa. Novak Djokovic tuvo que trabajar más de lo esperado, pero finalmente se ganó un lugar en la final del certamen español. El serbio, segundo preclasificado, debió remontar una desventaja de un set para superar por 4-6, 6-4 y 6-1 al brasileño Thomaz Bellucci, la gran sorpresa de la semana, tras dos horas y nueve minutos. Nole irá mañana por un nuevo título ante en número uno del mundo, Rafael Nadal, quien más temprano venció a Roger Federer [3].
Bellucci -que en octavos había bajado a Andy Murray [4] y en cuartos, a Tomas Bellucci [7]- fue un dignísimo rival para el número dos del mundo, quien durante todo el set inicial y los primeros games del segundo no pudo encontrarle la vuelta al juego rápido y profundo del sudamericano. En el primer parcial Bellucci sólo metió el 48% de sus primeros saques; pero ganó el 91% de los puntos que disputó y complicó mucho la devolución del serbio. El brasileño estuvo muy tranquilo, pero a la vez muy concentrado, y logró imponer su estrategia sin muchos problemas.
El europeo -que nunca se terminó de acomodar dentro de la cancha- se mostró incómodo con el dominio de su adversario y cometió muchos errores no forzados (19 en todo el set). En el quinto game, Bellucci concretó la única chance de quiebre que hubo en el parcial y sacó una ventaja de 4-2. Luego, mantuvo la diferencia y, en el 10º juego, cerró la manga con su saque.
Al igual que en el final del primer set, en el inicio del segundo a Djokovic se lo vio sin energía, quizás acusando el cansancio del intenso partido de ayer ante David Ferrer. Bellucci siguió presionando con su sólido servicio (67% de efectividad con el primero y dos aces) y, luego de haberse recuperado de un 0-40 en contra en el segundo game, concretó un quiebre en el tercero y se adelantó 2-1. Sin embargo, la reacción del serbio no tardó en llegar. Nole ganó confianza y se metió en el partido. El brasileño aflojó la presión, bajó su nivel y entregó las riendas del match. Y Djokovic no dejó pasar la oportunidad. Recuperó el break en el sexto game y, más tarde, con otro quiebre en el décimo, se llevó el set.
Haber ganado el segundo capítulo fue como una inyección anímica para el serbio, quien salió con todo a jugar el último parcial. En tanto, al cansancio físico y mental, Bellucci sumó una molestia en el aductor izquierdo, en el que recibió atención médica durante el set. En el segundo game, el más intenso del encuentro, Djokovic consiguió un quiebre, para poner el 2-0. A partir de allí, continuó creciendo dentro de la cancha.
El sudamericano siguió muy activo, no se entregó y peleó todas las pelotas; pero estuvo muy irregular y de a poco se fue desanimando, ante la constante presión de su rival. Nole volvió a quebrar en el sexto juego y, a continuación, selló el resultado con mucha autoridad. Así, sumó su 31ª victoria al hilo en la temporada y se aseguró un lugar en la final, en la que chocará con Nadal.
Cuadro de singles masculino de Madrid
Foto: Yahoo Sports