Microbachius, los pioneros del sexo

Posible apariencia del Microbachius

Los pioneros del sexo fueron unos peces prehistóricos llamados Microbachius que habitaron hace 365 millones de años. Estos animales son antepasados muy lejanos del ser humano, y marcaron un hito en la Historia de la Evolución, ya que fueron los primeros en tener mandíbulas. Los responsables de este descubrimiento son un grupo de científicos de la Universidad de Flinders (Australia del Sur), dirigido por el paleontólogo australiano John Long. El estudio de este hallazgo fue publicado en la prestigiosa revista científica Nature.
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Estos peces tenían una mandíbulas formadas por placas cortantes, que les permitían "mastica" a sus presas antes de ingerirlas, otra cosa por lo que son conocidos. Sus restos han sido hallados en países como Estonia, China y Reino Unido, exactamente en lagos de Escocia, y medían unos 8 centímetros de largo.
Los Microbachiues poseían unos órganos genitales exteriores en forma de L, formados principalmente por huesos. Estos les permitían transferir el esperma a las hembras. Por su parte, las hembras tenían unos pequeños huesos que servían de "sujeción" al órgano masculino cuando empezaba la cópula. Copulaban en posición vertical, lo que permitía que el macho pudiera maniobrar con su órgano genital durante el apareamiento, vamos, un "baile". Esto último todavía es sólo una teoría propuesta por John Long que habrá que demostrar.
El descubrimiento ocurrió cuando el profesor Long estaba estudiando un esqueleto de esta especia. Microbachius significa pequeños brazos, elementos que habían "vueltos locos" a los paleontólogos durante muchos años, sin saber para qué servían. El profesor australiano se dio cuenta de que estas pequeñas extremidades se utlizaban para que el macho pudiera poner su órgano en el área genital de la hembra. Gracias a los brazos y a los órganos genitales, los peces prehistóricos se convirtieron en pioneros de la cópula y la fertilización interna.
El equipo de Long llevaba trabajando en este tema entre los años 2008 y 2009, cuando decidieron que los orígenes del sexo interno estaban en un pez de la misma especie, pero más moderno y desarrollado. Ahora se han dado cuenta de que se equivocaron, y que los pioneros fueron estos peces.
Un pez que cambió la forma de reproducirse, un hito de la Naturaleza.