Nomen ignotum (XIII): Jordi Gosset

Dibujante autodidacta, Jordi Goset Rubio, a.k.a. “Gosset” (1933-2018), debutó en 1957 realizando ilustraciones y chistes gráficos para la revista Can Can de Bruguera. En 1963 publica una página de gags sobre “Trogloditas” en el DDT donde dibuja ya algún dinosaurio.
Pronto le cogió el gusto al humor prehistórico y, en 1965 crea para la revista Tío Vivo a su personaje más conocido, Hug –luego Hugh-, el troglodita. Sé que la tentación es fuerte, pero no, no se pronuncia como “Hugh” Jackman o “Hugh” Grant, para empezar porque la letra hache es muda en castellano. Es más bien el “Ug” que supondría el 90% del vocabulario de un neandertal.
Preocupado constantemente por procurarse la manduca, a la caza de «Pepe-saurios» o asaltando nidos de pterosaurios, Hug añora comodidades de la vida del siglo XX que no ha conocido y tiene su contrapartida intelectual en el sabio Pitákoras –inventor de las sopas de ajo-, que le llama homo brutus. En cuanto a los dinosaurios de la serie, lo cierto es que la deformación propia de las caricaturas de los tebeos de humor complica bastante la labor de calificación.
Por ejemplo, hay bastante poca diferencia fisiológica entre los Diplodocus y los «Pepe-saurios» (nomen ignotum) que aparecen en Hug. Ambos son retratados como bípedos de cuello y cola larga, con las extremidades anteriores más cortas; esto es, encajarían más en el perfil de un prosaurópodo. De hecho, nos parece encontrar cierta influencia del cómic francobelga de la época y, más concretamente, de la aventura de Spirou «Le voyageur du Mésozoïque» (1960) tanto en las patas, posteriores y anteriores, como en la expresión bobalicona del plateosaurio de André Franquin.
Tío Vivo #463 (1970)
"El viajero del Mesozoico"
Hug reapareció junto a Pitákoras en la serie Los trogloditas (Pulgarcito, 1980), pero la crisis acabó con Bruguera, que tenía los derechos sobre los personajes. De manera que Gosset los camufló dándoles otros nombres y variando un poco su aspecto en Burrus and Sapiens (1986), publicada en la efímera revista Garibolo de Compañía General de Ediciones, S.A.
Super Zipi y Zape #94 (1980)
El éxito de Hug impulsó otra serie de ambientación prehistórica, Roquita (1979), en Zipi y Zape. Roquita es la típica niña terrible de los tebeos, y no hace más que darle quebraderos de cabeza a su madre, pero el antagonista de la serie es el perro Roco. En los 90, Gosset recuperó a Roquita en las cabeceras dedicadas a Zipi y Zape por Ediciones B, pero a finales de la década abandona el medio.
Super Zipi y Zape #135 (1993)
Como vemos en la imagen, las tiranosaurias –el cartel dice tiranosaurios, pero los lacitos no engañan- que Gosset dibuja en Roquita tampoco muestran caracteres típicos de estos terópodos. Podría decirse que el rigor científico no forma parte de los tebeos de Gosset, pero precisamente ahí puede residir parte de su comicidad. Como en la serie de Hug, en las aventuras de Roquita abundan los nomen ignotum. He aquí varios ejemplos:
El dragonsaurio
El tontosaurio
El pisotonsaurio (jugando al yo-yo con el perro Roco)
El barrigonsaurio