Revista Cultura y Ocio
Son tan constantes las noticias sobre los «milagros» de Pablo Alborán que sus proezas han dejado de sorprendernos. La pasada Nochebuena, el sello discográfico del malagueño nos regalaba una nueva buena: la consecución del triple disco de Platino alcanzado por Terral, su más reciente trabajo. El comentario de los que aún se asombran ante tanto éxito se repite una y otra vez: «A este chico no hay quien lo pare». La afirmación no tiene nada de baladí, sobre todo si tenemos en cuenta que las entradas para el concierto que Alborán ofrecerá el próximo 6 de junio en el Auditorio Municipal de Cortijo de Torres –quedan más de seis meses para esta fecha– están a punto de agotarse. Hace días que colgó el cartel de sold out en la zona del graderío, y queda muy poco para que se acabe el papel de la zona de pista. Puede que los que quieran hacerse con una entrada para este concierto en Málaga no puedan hacerlo hoy mismo. Así de arrollador es Alborán: un artista que ha trastocado para siempre la industria de la música española y que ha logrado, a sus veinticinco años, ser el artífice de un fundamental capítulo en la historia de la música en nuestro país.
Como toda estrella, el malagueño también cuenta con sus detractores, pero poco pueden hacer los que le critican ante el poderío de un músico autodidacta que desde la habitación de su casa, y con la ayuda de Youtube, ha logrado conquistar el corazón de medio planeta. Las cifras siempre juegan a su favor: Terral –que salió a la venta el pasado 11 de noviembre– ha logrado las mejores cifras de ventas conseguidas nunca por un álbum suyo en la primera semana en el mercado, tras superar las 50.000 copias; a los dos días de poner a la venta las entradas para los conciertos de su nueva gira, se despacharon más de 30.000 entradas. Y es que Pablo Alborán convierte en oro todo lo que toca. El tour de Terral arrancará el próximo 28 de febrero en Colombia. Ecuador, Perú, Chile, Uruguay, México, Argentina y Paraguay serán los siguientes países en disfrutar del nuevo directo del malagueño, que el 15 de mayo pondrá los pies en España (San Sebastián), para ofrecer más de una treintena de recitales hasta septiembre. Desde su debut, en 2011, Alborán ha batido una gran cantidad de récords: 31 discos de platino; casi cien semanas en el número uno de la radio y ha recibido una gran multitud de galardones, entre los que destacan el Premio Revelación 40 Principales y tres nominaciones a los Grammys Latino. Además, ha sido el artista más vendedor durante tres años consecutivos (2011, 2012, 2013).
El videoclip del primer single de su nuevo disco, Por fin, ha conseguido más de 12 millones de visitas en Youtube. El segundo, Pasos de cero, ya tiene a todos sus seguidores, sobre todo a sus paisanos, en espera, puesto que las imágenes del vídeo ofrecen una postal muy malagueña, ya que Alborán decició rodarlo en el Balneario de los Baños del Carmen. El malagueño aparece sentado con su guitarra entre un grupo de amigos. «Rodaje de Pasos de cero. Os va a encantar. Mucha magia en el Balneario», escribía junto a una instantánea de la filmación en su cuenta de Instagram.
La última actuación de Pablo Alborán, que realizó junto a Joan Manuel Serrat en el programa de Nochebuena en La 1 de Televisión Española, provocó las críticas de los que no entendían cómo el malagueño había aceptado cantar en catalán. La red social Twitter se llenó de mensajes en contra de que se permitiesen canciones en catalán en el canal público. La polémica provocó que Serrat fuera durante toda la Nochebuena y gran parte del día de Navidad trending topic en la citada red social. Muchos de los que arremetieron contra Serrat también lo hicieron contra el malagueño, que no realizó ni un solo comentario ante estas críticas, demostrando que sabe encajar los golpes con elegancia. Una forma de ser y estar en la cima que le hace más grande si cabe.
Fuente: La Opinión de Málaga.