París-Manhattan (2012)

Alice (Alice Taglioni) es una farmacéutica agobiada por su familia. Tanto sus padres como sus amigos están preocupados porque sigue soltera y se está haciendo demasiado mayor para encontrar al chico de sus sueños. Alice asegura que ya le va bien la soltería, pero nadie parece creerla. Hasta que un día se fija en el instalador de la alarma de seguridad: se llama Víctor (Patrick Bruel) y le hace sentir algo parecido al amor. Para estar segura de lo que siente, Alice recurrirá al único hombre en el mundo en quien confía de verdad. Se trata de su director de cine favorito: el irrepetible Woody Allen.
Calificación: 5,922.
Tráiler de la Película


Ficha
Título Original: Paris-Manhattan.
Directora: Sophie Lellouche.
Guionista: Sophie Lellouche.
Actores: Alice Taglioni, Patrick Bruel, Marine Delterme, Michel Aumont, Woody Allen, Marie-Christine Adam, Louis-Do de Lencquesaing, Margaux Châtelier, Yannick Soulier, Arsène Mosca, Gladys Cohen, Julie Martel, Roman Guisset, Juliette Kruh, Paul-Edouard Gondard, Jacques Ciron.
Productor: Philippe Rousselet.
Fotografía: Laurent Machuel.
Música: Jean-Michel Bernard.
Montaje: Monica Coleman.
Diseño de Producción: Philip L'Évêque.
Diseño de Vestuario: Fabienne Katany.
País: Francia.
Lugares de Rodaje:
Fechas de Rodaje:
Año: 2012.
Duración: 77 minutos.
Edad: Apta para todos los públicos.
Género: Comedia, Romántica.
Estreno: 28-11-2014.
DVD (Venta):
Distribuidora: Savor Ediciones, S. A.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 2.548.
Recaudación: 17.836,14 €.
Visitas: 0.

Crítica
28-11-2014 – JOSU EGUREN
Sueños de una mitómana
No hay mejor crítica a "París-Manhattan" que el desinterés que muestra el director de "Zelig" (Woody Allen, 1983) cuando tiene que intervenir mediante un cameo que falla al completar el sentido de una película hecha con retales de su propia obra. Si a eso le sumamos la fijación de Sophie Lellouche, que ha elegido debutar con una ópera prima que destierra todo análisis para consagrarse a la adoración compulsiva de referencias ajenas, tenemos como resultado una película vacía, totalmente ensimismada con la cita y el sampler.
Lellouche no deja lugar a la duda y muestra sus cartas con una primera secuencia que reinterpreta de forma patosa los diálogos entre Humphrey Bogart y Woody Allen. Es lo que marcará el tono de la película y la borrosa descripción de sus personajes, siendo "Alice" (Woody Allen, 1990) y/o "Annie Hall" (Woody Allen, 1977) la protagonista y un mix de los enredos sexuales y psicológicos de "Hannah y sus hermanas" (Woody Allen, 1986) la familia que la rodea. A cualquier otro mitómano un puñado de homenajes le bastarían, pero Lellouche se afana en trufar su oferta con sketches de saldo (mención especial para el que alude a "Toma el dinero y corre", Woody Allen, 1969) y una torpe imitación de los suspensos dramáticos de "Match Point" (Woody Allen, 2005).
Nace la esperanza con dos líneas de guión en las que la directora francesa se autodenuncia llamando la atención sobre el recurso fácil e inopinado a las melodías de Ella Fitzgerald y Cole Porter, pero inmediatamente rectifica, haciendo gesto de una falsa ironía tan característica de la filmografía burguesa. Por si fuese poco, Alice y "Amelie" (Jean-Pierre Jeunet, 2001) comparten itinerarios en una ciudad que rebosa la vitalidad del cartón piedra.
En defensa de "París-Manhattan" se puede aludir a la perplejidad con la que interpreta su personaje Patrick Bruel, y la agilidad de un montaje que zarandea el cadáver de una historia clínicamente muerta.