Revista Deportes
El fútbol profesional tiene dos propósitos: Entretener al espectador y que uno de los dos equipos consiga la victoria. En el Valencia - Atlético de Madrid de la Eurocup se cumplió una de las dos premisas. El público se ha divertido a base de goles, carreras y regates de ensueño. Ambos equipos cumplieron su labor, pero el primer asalto se lo ha llevado el equipo colchonero por el valor doble de los goles fuera de casa en competición europea.En el césped de Mestalla se esperaban goles. Quizás por eso la primera parte decepcionó vagamente a los aficionados que se congregaron en Mestalla. El juego estaba en el verde. Ambos equipos desplegaron todo su arsenal, pero la pólvora estaba mojada. Pablo en el Valencia y Simao en el Atlético de Madrid no consiguieron materializar sus claras ocasiones de gol. Los jugadores seguidos con lupa en la grada, Fernandes y Jordi Alba estaban cumpliendo. El catalán no se arriesgaba en sus subidas por banda izquierda, mientras que el portugués completaba un buen primer tramo. Fernandes recuperaba balones, se ofrecía y manejaba el juego. Baraja fue un fiel escudero para el luso.En el palco se rumiaba que el resultado no iba a ser el que marcaba el electrónico en los primeros 45 minutos. Los presidentes de ambos equipos así lo indicaban a los medios. En esta ocasión Llorente y Cerezo no andaban muy desencaminados.El Valencia arrancó en la reanudación con ganas. Sacó las garras a pasear pero de nuevo sin acabar de morder. Villa no cogía la ocasión buena, Pablo seguía fallando y Silva sigue sin tener el olfato de gol que se le presupone a un delantero. Precisamente de un fallo se rompió el melón. Forlan y Agüero, desaparecidos en la primera mitad, aprovecharon un fallo de Bruno tras un corner sacado por el Valencia para trazar una contra de manual. Solos, los dos delanteros rojiblancos dibujaron el 0-1 en el marcador. Mestalla lanzó un suspiro y los 3.000 aficionados del Atlético apuraron la garganta.El gol colchonero noqueó al Valencia. Pero, un goleador inesperado iba a volver a dar el aliento tan necesario de la grada de Mestalla. Fernandes enganchaba un zapatazo desde fuera del área para batir al inconmensurable De Gea. 1-1, Fernandes se lo dedica a la grada que tanto lo ha criticado y la afición del Valencia vuelve a remar.Sin embargo otro golpe a los riñones del aficionado blanquinegro, el 1-2. Fallo de marcaje en un corner y Antonio Lopez anotaba el gol de la victoria momentanea del equipo de Quique Sánchez Flores.Emery y los suyos no habían dicho su última palabra. Joaquín, Zigic y Vicente salían al campo. Precisamente de las botas del de Benicalap salía el gol de la igualada. El extremo izquierdo valencianista, como en los viejos tiempos, apuraba linea de fondo y se la dejaba a Villa. El Guaje cuando menos te lo esperas te mata. Un picotazo del Guaje y 2-2.Con este resultado se llegó al final. Muchos dirán que ambos equipos merecieron la victoria. Lo que está claro es que el equipo valencianista se levantó con los dos golpes de los colchoneros y que estos se llevan un gran resultado para el Calderon. Aun así la eliminatoria no está perdida para el Valencia CF.