La pasta que solemos hacer en casa es de legumbres y aprovechando que de la comida turca que tomamos la otra semana nos había sobrado una salsa de pimientos picantes, he pensado en esta receta para aprovecharla.
200 gr. de Pasta de legumbres 1 Peperoncino fresco o seco una guindilla, cayena 25 gr. de Pecorino curado rallado o cualquier queso de oveja curado
Meter unos 5-6 tomates rojos bien maduros en agua hirviendo un par de minutos, para poder pelarlos fácilmente, abrirlos y quitarles las semillas y la gelatina que los rodean.
Cortar la pulpa a daditos o rallarla, dependiendo de si gusta el sofrito más o menos fino.
Poner la olla con agua para la pasta al fuego, cuando hierva, añadir sal e introducir la pasta y dejarla cocer según indique el fabricante.
Calentar un buen chorro de aceite de oliva a fuego suave, en una sartén lo suficientemente grande como para saltear la pasta.
Añadir el ajo picado y el peperoncino cortado en láminas muy finas. Si se usa peperoncino seco, desmenuzarlo con los dedos.
Cuando el ajo esté ligeramente dorado incorporar la pulpa de tomate en la sartén.
Salar y dejar cocer el sofrito. Dependiendo de si se ha usado pulpa o troceado el tomate, puede tardar más o menos en cocerse, entre 15 y 20 minutos.
Colar la pasta, reservar medio cucharón de agua de la cocción, por si el sofrito quedara muy seco.
Agregar la pasta y el medio cucharón de agua de cocción en la sartén con el sofrito si hiciera falta.
Saltear la pasta con el contenido de la sartén un par de minutos.
Servir la pasta con un poco de perejil picado y el pecorino rallado por encima.
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