Marte tiene dos pequeños satélites; Phobos y Deimos. Estas lunas fueron descubiertas en 1877 por el astrónomo estadounidense Asaph Hall.
Phobos mide unos 22 km de diámetro, y orbita Marte a una distancia de 9.234,42 kilómetros cuando está en el perigeo (más cerca de Marte) y 9.517,58 kilómetros cuando está más alejado (apoapsis). A esta distancia, Phobos está por debajo de la altitud sincrónica, lo que significa que tarda sólo 7 horas en orbitar Marte.
Phobos está muy cerca del planeta rojo con lo que está muy afectado por las fuerzas de marea, con lo que poco a poco se está rompiendo. Se pueden ver esas grietas en la superficie del satélite.
Imagen: Las ranuras de la luna Phobos, producidas por las fuerzas de marea (la atracción gravitatoria mutua del planeta y la luna). Créditos: NASA / JPL-Caltech / Universidad de ArizonaEntre 30 a 50 millones de años se romperá a trocitos creando un pequeño anillo alrededor del planeta, posiblemente se podría observar con telescopios desde la Tierra (sí es que queda alguien en la Tierra para esas fechas…) o también sería una vista impresionante para los posibles habitantes del planeta Marte sí por fin nos decidimos a viajar y vivir en otros planetas.
Deimos mide alrededor de 12 km y orbita el planeta a una distancia de 23.455,5 kilómetros (perigeo) y 23.470,9 kilómetros (apoapsis). Tiene un período orbital más largo, costandole 1,26 días en completar una rotación completa alrededor del planeta.
Los científicos creen que estos dos satélites son asteroides que fueron capturados por la gravedad del planeta. Otra posibilidad es que las dos lunas se formaran a partir de material que quedó sin acretar tras la formación del planeta Marte. Sin embargo, si esto fuera cierto, sus composiciones serían similares a la de Marte, más que similar a la de los asteroides. Una tercera posibilidad es que un cuerpo impactó en la superficie de Marte, expulsando materia al espacio y los restos crearon esas dos lunas, de forma similar a como se cree que se formó la Luna de la Tierra.