Sabía yo que no me iba a librar ni en el último Reto “Alfabeto Dulce” de esta segunda vuelta al abecedario. Hasta el último momento desafiando los tiempos y las horas de sueño. Yo creo que en esta ocasión he batido el record, acostándome el domingo a las tantas horneando este riquísimo bizcocho, (viendo como me llegaban vuestras recetas y yo con mucho trabajo todavía por hacer).
Ayer sin ir más lejos empezaba a escribir esta entrada en la hora de la comida y ya en casa por la tarde, fotografiaba el plum cake, editaba las fotos y terminaba de dar los últimos retoque a este post. A tiempo por los pelos, pero hubiera estado feo que yo, la anfitriona de este tan dulce evento, hubiera llegado tarde.
Este mes me ha tocado a mi elegir los ingredientes para preparar este último reto. Quedaba una letra difícil, al menos para encontrar ingredientes que empezaran por ella, por eso finalmente me he decantado a elegir un ingrediente que la contuviese. En el fondo quería elegir un ingrediente que diera mucho juego, además de que en este caso, la mermelada, que ha sido el ingrediente que cierra esta segunda vuelta, no sólo permite preparar postres de lo más dispares, sino que además dada la variedad de sabores que se pueden elegir, multiplica esas opciones.
El segundo ingrediente era libre, así cada uno podía combinar el que más le gustase con la mermelada de su elección. No diréis que no he sido benévola… Además también podíais optar por preparar la mermelada vosotros que sé que muchos lo hacéis con la fruta de temporada para comerla después cuando ya no se puede conseguir en las fruterías.
Alguna vez he preparado mermelada en casa. Recuerdo que cuando me compré la Thermomix, fue lo primero que hice, una mermelada de naranja amarga (estilo inglés) con cascara de naranja cortada en juliana, que sin lugar a dudas es mi preferida, aunque también he hecho de cerezas, de moras silvestres alguna vez que he ido con las niñas a recogerlas o de tomate que me encanta para tomarla con el queso de cabra o con el foie.
Como sabéis porque lo he dicho muchas veces, los cítricos me encantan y son muchas las recetas que he preparado con ellos y con mermelada de naranja también. En este momento se me vienen a la mente unas galletas navideñas que preparé hace un par de años. Provienen de Suiza y son completamente adictivas. Son las Spitzbuben cookies. Se rellenan con mermelada y son similares a las Linzer cookies austriacas, que también he preparado en Navidad y que también podéis ver en el blog.
Por eso hoy me he decido a preparar un bizcocho sencillísimo con aromas cítricos también, pelín ácido y amargo a la vez y con un toque de whisky, que combina a la perfección con la naranja. A continuación os cuento cómo se prepara.
PLUM CAKE DE NARANJA AMARGA AL WHISKY
INGREDIENTES
Para el bizcocho
- 200 gr. de mantequilla sin sal
- 200 gr. de azúcar moreno
- 3 huevos
- 200 gr. de harina
- 2 cucharaditas de levadura
- 100 gr. de mermelada de naranja amarga (estilo inglés)
- 3 cucharadas de whisky
Para la decoración
- 1 naranja
- 1 pomelo rosa
- 50 gr. de mermelada
ELABORACIÓN
Precalentamos el horno 180° C.
Engrasamos un molde de plum cake con mantequilla. Tamizamos la harina con la levadura.
En el bol de la batidora de pie ponemos la mantequilla con el azúcar y batimos hasta que la mezcla blanquee y aumente su volumen. A continuación vamos agregando los huevos de uno en uno sin dejar de batir, dejando que se integren antes de añadir el siguiente.
Añadimos la harina con la levadura y batimos hasta que se integre. Incorporamos la mermelada de naranja y por último añadimos el whisky y mezclamos hasta que la masa sea homogénea.
Vertemos la mitad de la masa en el molde y ponemos unas cucharadas de mermelada en el centro de la masa. Vertemos el resto de masa, alisamos con una espátula y horneamos de 60 a 70 minutos dependiendo del horno, o hasta que insertando un palito en el centro del bizcocho, éste salga limpio. Si vemos que se dora demasiado podemos cubrir el bizcocho con un poco de papel de aluminio.
Dejamos enfriar el bizcocho 10 minutos sin desmoldarlo y posteriormente lo pasamos a una rejilla y dejamos que se enfríe por completo.
Para decorarlo, calentamos un poco la mermelada en el microondas y con ayuda de una brocha pincelamos el bizcocho por encima. Pelamos la naranja y el pomelo y les quitamos bien la parte blanca. Los cortamos en rodajas muy finas y las colocamos en la parte superior del bizcocho.
Añadimos la mermelada restante por encima. Podemos acompañar el bizcocho con mermelada servida aparte.
No os podéis imaginar los jugoso y esponjoso que está. Además si como a mi os encanta la mermelada estilo inglés, os encantará encontraros los trozos crujientes de cáscara de naranja confitada entre la miga del bizcocho.
Por supuesto que también podéis suprimir el whisky para que así los más pequeños de la casa puedan probar el bizcocho y llevarse un buen trozo al cole para tomárselo en el recreo.
Os propongo algo: como la naranja casa a la perfección con el chocolate, podéis añadir a la masa unos chips de chocolate negro y así tendremos "la opción infantil" de este bizcocho.
No es que el whisky le aporte un sabor fuerte, porque tan solo lleva 3 cucharadas de licor, pero obviamente para los pequeñines mejor sólo poner el chocolate. Incluso podéis no poner las rodajas de naranja por encima y bañar el bizcocho con una ganache de chocolate con leche. Sólo de pensarlo se me está haciendo la boca agua.
Antes de que acabe el mes tenemos que decidir, qué hacemos con nuestro reto mensual... Id pensándolo porque lo vamos a decidir entre todos, ya que sin vosotros este reto nunca hubiera sido posible.